La demanda de materias primas por parte de las grandes industrias de Asia determina la elevación en los precios internacionales de los minerales, es el caso de la China, el Japón, Corea y la India que se encuentran en un proceso especial de crecimiento industrial y acuden a la compra masiva de concentrados de minerales para satisfacer la exigencia de sus gigantes industrias que producen para cubrir a su vez la demanda de países del occidente. En este proceso se genera también un factor de especulación que es absorbido sin embargo por las mismas potencias que juegan con los valores en los precios internacionales.
Hay un tercer componente y es el relacionado con las medidas preventivas de los grandes países que buscan refugio en los minerales preciosos, de manera especial en el oro y la plata, por lo que generan también en otras latitudes una serie de alteraciones en el orden financiero, induciendo a otras economías a resguardarse también en el dólar con lo que el valor de los metales preciosos está alcanzando las nubes.
En el caso del oro su precio estuvo sobre los 1.738 dólares la onza troy, en tanto que la misma medida de la plata se cotizó en 33. 75 dólares, lo que muestra un futuro optimista para las transacciones bursátiles de los meses venideros en tanto la situación de las industrias asiáticas siga en franca competencia.
En el caso nacional, amerita que las autoridades del área minera, por un lado y los industriales del sector, definan estrategias para impulsar proyectos auríferos y argentíferos (plata) para poder competir en los mercados externos con una oferta de metales preciosos que por su precio actual cubrirán exitosamente cualquier inversión. ( Uru).
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