El Gobierno anunció ayer que recién en julio se pronunciará si continúa o no el contrato de riesgo compartido entre la Empresa Siderúrgica del Mutún (ESM) y Jindal, debido a que la empresa india solicitó su resolución.
“Cuando concluya el periodo que tenemos para darle respuesta (a Jindal) vamos a hacer conocer una posición oficial del Gobierno boliviano”, adelantó el ministro de Minería, Mario Virreira.
La resolución (culminación) del contrato o la introducción de modificaciones será conocida recién en julio, una vez que concluyan los 30 días del plazo para el efecto, pues la carta de Jindal fue enviada en los primeros días del presente mes.
A inicios de junio, Jindal envió a la ESM una carta mediante la que pide romper su contrato, exponiendo como una de las razones la falta de garantías para la provisión de seis millones de metros cúbicos diarios de gas natural desde 2014, para desarrollar el proyecto siderúrgico.
La cláusula 35.2 del contrato establece que, después de recibir una solicitud de resolución de contrato, “la parte afectada podrá también considerar tener discusiones conjuntas (...) en un plazo razonable de 30 días o el que resultare justificadamente necesario y el procedimiento a ser seguido en este tema”.
En cuanto la ESM recibió la nota, su directorio sostuvo reuniones con personeros de Jindal para llegar a un preacuerdo que permita que esa compañía se mantenga operando en el yacimiento de hierro situado en el municipio de Puerto Suárez. En esas citas, la firma india condicionó su permanencia en el país a que el Gobierno acepte una modificación del contrato, invalide la ejecución de dos boletas de garantía que la ESM realizó en 2010 y 2012, y anule todos los procesos judiciales abiertos contra su presidente en Bolivia, Vikrant Gujral.
Con respecto a esos requerimientos, Virreira dijo que “se aceptarán las condiciones que sean favorables para el pueblo boliviano y de acuerdo con los intereses también de la región”.
Aseveró que el Gobierno da prioridad al desarrollo regional. “Los representantes de la región, Puerto Suárez en principio y de Santa Cruz también, manifiestan su esperanza de que Jindal contribuya a la región”.
Jindal propone cambiar el contrato debido a que YPFB le ofertó sólo 2,5 millones de metros cúbicos de gas diarios desde 2014, y no los seis que pide. Esta merma, según esa empresa, obliga a disminuir el tamaño y capacidad de sus plantas y, por ende, las inversiones que define el contrato establecido en 2008 y elevado a rango de ley por la Asamblea. Sobre las dos boletas de garantía ejecutadas, propone que los 36 millones de dólares que suman ambas valgan a cuenta de un nuevo monto de garantía, el cual surgirá si se modifican las cifras del contrato.
Auditoría
Virreira invocó a Jindal a mostrar “objetivamente” cuánto invirtió en Bolivia y dejar que se hagan auditorías a su manejo financiero. “Ésta será una respuesta clara para el pueblo boliviano”, precisó. “Si ellos quieren modificar su accionar, realmente demostrar que quieren invertir en Bolivia, tienen que permitir que se realicen las auditorías”.
Anuncian reunión este miércoles
Diálogo El presidente del Comité Cívico de Puerto Suárez, José Luis Santander, informó que el 20 de junio habrá una reunión entre un representante del Presidente de Jindal Steel & Power, que llegará desde Brasil, y el presidente de la Empresa Siderúrgica de Mutún, Ricardo Cardona, en el Ministerio de Minería.
Cívicos Existe la posibilidad de que los cívicos de Puerto Suárez participen en el encuentro que puede permitir llegar a un preacuerdo para la reanudación del proyecto Minero Siderúrgico de Mutún.
Anuncio La cita servirá también para que se generen condiciones aptas para la llegada de Naveen Jindal al país, a fin de sostener una reunión con el presidente Evo Morales.
Reingeniería La reunión del miércoles permitirá analizar la nueva propuesta de la Jindal Steel Bolivia y la posición asumida por el Gobierno nacional sobre la necesidad de realizar una reingeniería del proyecto, reportó Santander.
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