Los cooperativistas evitaron ayer que el yacimiento de Colquiri pase en su totalidad a manos de la Corporación Minera de Bolivia (Comibol), pero se comprometieron a devolver cuatro áreas que no eran explotadas, con lo que se puso punto final al conflicto con los asalariados que duró 19 días y dejó 27 personas heridas.
El Gobierno iniciará las negociaciones con la empresa Sinchi Wayra para dar por concluido el contrato de arrendamiento del yacimiento de Colquiri y promulgará un decreto para definir las áreas que serán restituidas al Estado para su explotación.
“SIN GANADORES NI PERDEDORES”. El ministro de Gobierno, Carlos Romero, calificó el acuerdo como un parto difícil, después de casi 13 horas de diálogo, en tanto que el principal dirigente de los asalariados de Colquiri, Severino Estallani, reconoció que será difícil explicar a sus bases y a los habitantes del distrito minero, que no alcanzaron que el yacimiento pase en su totalidad a control estatal, como demandaron.
Admitió que cedieron la veta Rosario, una de las más ricas, para evitar nuevos enfrentamientos y, a partir de este convenio, Comibol pasará a controlar casi un 90 por ciento del yacimiento, donde se explota estaño y zinc. Podrá obtener una utilidad mensual de seis millones de dólares.
El secretario Ejecutivo de la Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia (FSTMB), Miguel Pérez, calificó al acuerdo como “un buen paso”, pues permitirá, en el futuro, que el Estado controle otras dos minas que Sinchi Wayra explota bajo la modalidad de concesión: Porco, en Potosí, y Bolívar, en Oruro.
A su turno, el presidente de la Federación de Cooperativas Mineras de Bolivia (Fencomin), Albino García, consideró que en el acuerdo “no hubo ganadores ni perdedores”, porque independientemente de haber conseguido un área sólida, también su sector renunció a otras que no eran explotadas. “Es equitativo”.
Entretanto, el secretario ejecutivo de la Central Obrera Boliviana (COB), Juan Carlos Trujillo, dijo que ganaron el diálogo en las negociaciones y la unidad para poner fin a un conflicto que pudo tener graves consecuencias.
Finalmente, el ministro de Minería, Mario Virreira, quien participó en las negociaciones, señaló que se trata de un acuerdo conveniente para el Estado.
EL GOBIERNO NO PERMITIRÁ UN NUEVO CONFLICTO. Las negociaciones entre el Gobierno, mineros asalariados y cooperativistas se iniciaron la noche del lunes en oficinas del Viceministerio de Régimen Interior y concluyeron cerca de las 13.00 de ayer.
El ministro de Gobierno, Carlos Romero, reconoció que el conflicto revestía de “mucha gravedad y magnitud”, no sólo por las demandas de ambos sectores, sino por la escalada de violencia que se cernía sobre el distrito minero de Colquiri, que está ubicado en la provincia Inquisivi, del departamento de La Paz.
El convenio fue considerado por la autoridad como “histórico” porque permitirá “la nacionalización del yacimiento minero de Colquiri, respetando el trabajo de los mineros asalariados y la existencia de los cooperativistas" en cumplimiento de la Constitución Política. Reveló que hubo momentos tensos y en algún momento debates con tono elevado, durante las negociaciones.
La autoridad evitó formular comentarios respecto a la posibilidad de que con este antecedente, se repita la toma de otras áreas, como ocurrió recientemente en Porco, Potosí, donde los cooperativistas se instalaron en las oficinas de la empresa Sinchi Wayra.
Se conversará con la gente que ocupó ese centro de trabajo administrativo, aunque señaló que “ese tipo de actitudes no las podemos tolerar”.
En tanto, el Presidente de Fencomin informó que la ocupación de las oficinas en Porco y la posterior decisión de mantener una vigilia, se originaron en el hecho de que no existe un contrato de arrendamiento con la Comibol y otros problemas que deben ser solucionados a la mayor brevedad para evitar el surgimiento de un nuevo conflicto.
Las negociaciones entre cooperativistas y ejecutivos de Sinchi Wayra se iniciaron ayer a fin de que se devuelva la sede.
1.000 trabajadores, entre cooperativistas y asalariados, pasarán a formar parte de la mina Colquiri.
19 días duró el conflicto minero de Colquiri, que se solucionó ayer después de 13 horas de diálogo.
EL ACUERDO DICE QUE SE REVERTIRÁ LA VETA ROSARIO, SI LOS COOPERATIVISTAS VUELVEN A OCUPAR ÁREAS DE LA COMIBOL.
EL CONVENIO CONSTA DE 10 PUNTOS. Ratifica la decisión de recuperar en favor del Estado la mina Colquiri. La veta Rosario queda en poder de la cooperativa 26 de Febrero y restituye a la Comibol las vetas: Doble Ancho, Blanca Norte, Alto Colquiri, Armas y otras que no se trabajan.
NO EXISTEN NUEVAS ASOCIACIONES. La cooperativa no podrá asociarse con transnacionales o terceros nacionales, que hubieran causado daño al Estado. Tampoco podrá incrementar el número de socios ni personal.
Se implementarán medidas contra el robo de minerales, lo que se garantizará con intervención de militares.
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