La puesta en marcha del Complejo Metalúrgico de Karachipampa depende del arreglo o eventual compra de un turbo expansor de oxígeno; equipo necesario para que se pueda poner en funcionamiento el horno de fundición, según informó el ministro de Minería y Metalurgia, Mario Virreira.
La autoridad señaló que el expansor original de la planta no está en condiciones. Fue enviada a Estados Unidos de Norteamérica para su arreglo y hasta el momento no se conoce cuánto tiempo demandará ese trabajo.
Se abrió la posibilidad de comprar un nuevo equipo pues ello significaría acelerar los tiempos. Sin embargo, aún no existe nada oficial sobre este tema porque comisión que viajó al país del norte aún no presentó su respectivo informe.
La planta de Karachipampa debió entrar en funcionamiento a fines del pasado año, pero las autoridades reportaron algunas dificultades no previstas que retrasaron el encendido de los hornos de fundición para tratar complejos de plomo-plata y zinc.
La planta fue concluida en enero de 1984 (en el gobierno de Hernán Siles) con una inversión cercana a los 200 millones de dólares con capacidad de tratar 51.000 toneladas de concentrados de plata y plomo por año.
Una vez que la planta entre en funcionamiento podrá sacar lingotes de plomo y plata con una pureza del 99,88 por ciento además de recuperar otros subproductos por el proceso de fundición.
El 3 de enero, el presidente Evo Morales encendió el horno y se efectuaron los trabajos de verificación de la calidad de los ladrillos del horno y hoy se espera el turbo expansor para poner en marcha el proceso de industrialización minera.
No hay comentarios:
Publicar un comentario