Los trabajadores de la Empresa Metalúrgica Vinto buscarán que el gobierno les otorgue un financiamiento mínimo de 30 millones de dólares, para la inversión en la fundición, dijo el ejecutivo del Sindicato Mixto de Trabajadores Metalurgistas de Vinto, Clemente Cano.
“No creemos que el gobierno nos regale (el financiamiento), pero queremos en primer lugar el desembolso de 30 millones de dólares, y luego veremos si el gobierno tiene la capacidad de condonar adelante, caso contrario pagaremos, como también lo hicimos con los 15 millones de dólares en un año”, dijo Cano. Si los 30 millones de dólares, se otorga como un crédito para la EMV, los trabajadores metalurgistas buscarán que el plazo para pagar la deuda sea mayor, para no ocasionar problemas dentro de la empresa.
“Nosotros como trabajadores metalurgistas vamos a garantizar que esta empresa (Vinto), no se caiga, al contrario debe salir a flote, tiene que fortalecerse aún más el aspecto económico y productivo; y siempre como trabajadores daremos el hombro a la fundición”, manifestó Cano.
El pedido de los metalurgistas será expresado al presidente de la República, Evo Morales Aima, si se concreta la entrevista de urgencia que permitirá estudiar las formas de financiamiento de la deuda restante de 23.7 millones de dólares de la EMV a la EMH, que debe ser pagada en enero de 2009, como lo exigen los mineros de Huanuni.
La situación de la EMV, es relativamente normal -según Cano-, con la llegada de materiales y la compra de electrodos, asimismo se están tomando las previsiones para las reparaciones de los hornos reverberos que funcionan con gas, porque de unos 4 a 6 meses pueden tener resquebrajamiento.
“Ha existido un malentendido indicando que Vinto esta en crisis, por eso nuestro ejecutivo de la empresa fue hasta la China, ante la empresa que proporciona los electrodos, y desmintió que la fundidora esta en crisis, mucho menos en déficit”, afirmó Cano.
Respecto a la compra de los concentrados de las cooperativas mineras, el ejecutivo metalurgista explicó que aún sigue la compra de los minerales de baja ley, pero su tratamiento es costoso.
En el tostado de estos concentrados se requiere un mayor proceso, para eliminar el arsénico, el azufre, que son unos gases que causa superficialmente un cierto malestar en la salud de los trabajadores.
“No creemos que el gobierno nos regale (el financiamiento), pero queremos en primer lugar el desembolso de 30 millones de dólares, y luego veremos si el gobierno tiene la capacidad de condonar adelante, caso contrario pagaremos, como también lo hicimos con los 15 millones de dólares en un año”, dijo Cano. Si los 30 millones de dólares, se otorga como un crédito para la EMV, los trabajadores metalurgistas buscarán que el plazo para pagar la deuda sea mayor, para no ocasionar problemas dentro de la empresa.
“Nosotros como trabajadores metalurgistas vamos a garantizar que esta empresa (Vinto), no se caiga, al contrario debe salir a flote, tiene que fortalecerse aún más el aspecto económico y productivo; y siempre como trabajadores daremos el hombro a la fundición”, manifestó Cano.
El pedido de los metalurgistas será expresado al presidente de la República, Evo Morales Aima, si se concreta la entrevista de urgencia que permitirá estudiar las formas de financiamiento de la deuda restante de 23.7 millones de dólares de la EMV a la EMH, que debe ser pagada en enero de 2009, como lo exigen los mineros de Huanuni.
La situación de la EMV, es relativamente normal -según Cano-, con la llegada de materiales y la compra de electrodos, asimismo se están tomando las previsiones para las reparaciones de los hornos reverberos que funcionan con gas, porque de unos 4 a 6 meses pueden tener resquebrajamiento.
“Ha existido un malentendido indicando que Vinto esta en crisis, por eso nuestro ejecutivo de la empresa fue hasta la China, ante la empresa que proporciona los electrodos, y desmintió que la fundidora esta en crisis, mucho menos en déficit”, afirmó Cano.
Respecto a la compra de los concentrados de las cooperativas mineras, el ejecutivo metalurgista explicó que aún sigue la compra de los minerales de baja ley, pero su tratamiento es costoso.
En el tostado de estos concentrados se requiere un mayor proceso, para eliminar el arsénico, el azufre, que son unos gases que causa superficialmente un cierto malestar en la salud de los trabajadores.
Este problema que soportan los trabajadores de Vinto, esta siendo analizado por los técnicos de la EMV, porque también los concentrados de Huanuni, tienen baja ley.
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