El problema de la mina Santa María ocasionó en días pasados otro enfrentamiento entre ex mineros y comunarios, unos defendiendo sus fuentes de empleo, los otros queriendo incorporarse a un trabajo considerado más seguro que la agricultura.
Lo lamentable de este caso es que autoridades prefecturales de Cochabamba y Oruro intervienen en el caso que en realidad es de exclusiva competencia de la jurisdicción orureña, dado que la mina en pugna no tiene ni un metro en el territorio cochabambino, salvo la presión de comunarios de una población que vieron la oportunidad para mejorar sus ingresos acomodándose en la mina Santa María. Se espera que el caso tenga un a solución legal y no política.
MERCADO ASIATICO
Una alternativa de comercialización de concentrados producidos por nuestra minería, podían acomodarse de manera directa en “mercados asiáticos”, según lo hizo saber el Ministerio de Minería y Metalurgia, señalando además que por ese motivo dejaría de comprar la producción minera nacional dejando que los productores -quién sabe- puedan acceder a esos mercados.
En la práctica resulta que la posición de los “asiáticos” tiene particularidades muy especiales, no compran cualquier mineral y de cualquier ley, son duchos para encontrar lo que les interesa y pagar lo que consideran satisfactorio a sus intereses, por tanto el stock de nuestros minerales difícilmente será vendido en condiciones favorables a nuestros productores.
BANCO FINANCIERO
Las circunstancias del tiempo presente nos muestran las debilidades que tenemos en materia financiera para consolidar proyectos minero metalúrgicos de envergadura, lo que significa mantener las riquezas sin explotación y menos la aplicación “preventiva” de explorar y asegurar nuestras potencialidades.
Hay necesidad de un organismo financiero que además reciba un soporte excepcionalmente fuerte de nivel internacional una vez que sea “socializada” la idea de encarar SERIAMENTE un plan conjunto de minería y metalurgia, que satisfaga la expectativa de los productores medianos, cooperativistas y del sector privado chico donde se generan las mejores actividades de la minería.
LOS AVASALLAMIENTOS
No han terminado los ilegales movimientos de comunarios, que amparados de algún modo por autoridades políticas, persisten en su actitud de avasallamiento de las propiedades privadas alterando los planes productivos mineros y poniendo en riesgo centenares de empleos y millones de pérdida, por cumplir al pie de la letra aquello de que los “originarios” tienen derecho a explotar sus tierras, aunque en este caso no tienen ni la más remota idea del trabajo minero
Como se trata de un planteamiento político consignado en el texto de reforma de la CPE ya en la fase de socialización de este material los avasallamientos son parte de la práctica de despojo, que seguramente se acrecentará más adelante si ahora no se ponen los puntos sobre las íes. Es algo que compite al Gobierno para garantizar jurídicamente la propiedad minera.
Lo lamentable de este caso es que autoridades prefecturales de Cochabamba y Oruro intervienen en el caso que en realidad es de exclusiva competencia de la jurisdicción orureña, dado que la mina en pugna no tiene ni un metro en el territorio cochabambino, salvo la presión de comunarios de una población que vieron la oportunidad para mejorar sus ingresos acomodándose en la mina Santa María. Se espera que el caso tenga un a solución legal y no política.
MERCADO ASIATICO
Una alternativa de comercialización de concentrados producidos por nuestra minería, podían acomodarse de manera directa en “mercados asiáticos”, según lo hizo saber el Ministerio de Minería y Metalurgia, señalando además que por ese motivo dejaría de comprar la producción minera nacional dejando que los productores -quién sabe- puedan acceder a esos mercados.
En la práctica resulta que la posición de los “asiáticos” tiene particularidades muy especiales, no compran cualquier mineral y de cualquier ley, son duchos para encontrar lo que les interesa y pagar lo que consideran satisfactorio a sus intereses, por tanto el stock de nuestros minerales difícilmente será vendido en condiciones favorables a nuestros productores.
BANCO FINANCIERO
Las circunstancias del tiempo presente nos muestran las debilidades que tenemos en materia financiera para consolidar proyectos minero metalúrgicos de envergadura, lo que significa mantener las riquezas sin explotación y menos la aplicación “preventiva” de explorar y asegurar nuestras potencialidades.
Hay necesidad de un organismo financiero que además reciba un soporte excepcionalmente fuerte de nivel internacional una vez que sea “socializada” la idea de encarar SERIAMENTE un plan conjunto de minería y metalurgia, que satisfaga la expectativa de los productores medianos, cooperativistas y del sector privado chico donde se generan las mejores actividades de la minería.
LOS AVASALLAMIENTOS
No han terminado los ilegales movimientos de comunarios, que amparados de algún modo por autoridades políticas, persisten en su actitud de avasallamiento de las propiedades privadas alterando los planes productivos mineros y poniendo en riesgo centenares de empleos y millones de pérdida, por cumplir al pie de la letra aquello de que los “originarios” tienen derecho a explotar sus tierras, aunque en este caso no tienen ni la más remota idea del trabajo minero
Como se trata de un planteamiento político consignado en el texto de reforma de la CPE ya en la fase de socialización de este material los avasallamientos son parte de la práctica de despojo, que seguramente se acrecentará más adelante si ahora no se ponen los puntos sobre las íes. Es algo que compite al Gobierno para garantizar jurídicamente la propiedad minera.
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