El Sindicato de Trabajadores Mineros de Huanuni decidió tomar hoy las instalaciones de la Empresa Metalúrgica Vinto (EMV), en forma pacífica, porque la fundición no había cancelado hasta anoche la deuda de 38 millones de dólares, que arrastra desde junio 2008.
La decisión fue tomada en la asamblea general de mineros desarrollada en Huanuni, donde se dio plazo hasta las 20:00 horas de ayer, al ministro de Minería y Metalurgia, Luís Alberto Echazú; presidente de la Corporación Minera de Bolivia (Comibol), Hugo Miranda Rendón y el gerente de la EMV, Francisco Infantes Irusta, para que se presenten en Huanuni para solucionar el problema entre las dos empresas del Estado.
El vicepresidente de la comisión social del Sindicato de Mineros de Huanuni, Apolinar Baltazar, en conversación con LA PATRIA, dijo que no sabe por qué existe “tozudez de las autoridades para no desarrollar la reunión en Huanuni”.
Sin embargo, insistió que la deuda de la fundición de Vinto alcanza a 38 millones de dólares americanos, con la Empresa Minera Huanuni, y debe procederse a las liquidaciones respectivas.
Vinto, mediante un comunicado, informó ayer que la deuda alcanzaba a 17.67 millones de dólares, y no existe ningún contrato sobre los concentrados que Huanuni entregó en octubre y noviembre a la fundición.
Ante el difícil panorama, la asamblea de los trabajadores de Huanuni, en uno de los puntos de la resolución aprobada ayer, exige que la administración tanto de la EMH como de la EMV, sea una sola.
Asimismo, los mineros no están de acuerdo que el dinero generado por Huanuni vaya a financiar el bono otorgado por el Estado a las cooperativas mineras y las empresas privadas de la minería. LA PATRIA, también consultó a Baltazar, si Comibol era el intermediario en los pagos a la EMH, al respecto comentó que trataron de tener conversaciones con el presidente de la entidad, pero no tuvieron respuesta.
Los mineros de Huanuni determinaron que la única responsable por las pérdidas de la producción de la empresa es la EMV y ella debe asumir las consecuencias.
El problema entre la mina Huanuni y la metalúrgica de Vinto se agudizó el lunes 1 de diciembre, cuando tres dirigentes mineros buscaban la intermediación del prefecto, Alberto Luís Aguilar Calle, para que concrete una reunión con el ministro de Minas, el presidente de Comibol, y el gerente de la EMV, para resolver el conflicto, pero el prefecto arguyó que Echazú se encontraba en La Paz, hecho que fue desmentido por los mineros que constataron minutos antes de la reunión que Echazú se encontraba en ese momento en el edificio de la Prefectura.
EN LA PAZ
En La Paz, el ministro de Minería Alberto Echazú, convocó a los gerentes de ambas empresas, al presidente de la Comibol y a los responsables financieros para analizar el conflicto.
Un informe de esa repartición estatal afirma que las conversaciones continuarán hoy hasta lograr una solución que satisfaga a ambas partes.
La decisión fue tomada en la asamblea general de mineros desarrollada en Huanuni, donde se dio plazo hasta las 20:00 horas de ayer, al ministro de Minería y Metalurgia, Luís Alberto Echazú; presidente de la Corporación Minera de Bolivia (Comibol), Hugo Miranda Rendón y el gerente de la EMV, Francisco Infantes Irusta, para que se presenten en Huanuni para solucionar el problema entre las dos empresas del Estado.
El vicepresidente de la comisión social del Sindicato de Mineros de Huanuni, Apolinar Baltazar, en conversación con LA PATRIA, dijo que no sabe por qué existe “tozudez de las autoridades para no desarrollar la reunión en Huanuni”.
Sin embargo, insistió que la deuda de la fundición de Vinto alcanza a 38 millones de dólares americanos, con la Empresa Minera Huanuni, y debe procederse a las liquidaciones respectivas.
Vinto, mediante un comunicado, informó ayer que la deuda alcanzaba a 17.67 millones de dólares, y no existe ningún contrato sobre los concentrados que Huanuni entregó en octubre y noviembre a la fundición.
Ante el difícil panorama, la asamblea de los trabajadores de Huanuni, en uno de los puntos de la resolución aprobada ayer, exige que la administración tanto de la EMH como de la EMV, sea una sola.
Asimismo, los mineros no están de acuerdo que el dinero generado por Huanuni vaya a financiar el bono otorgado por el Estado a las cooperativas mineras y las empresas privadas de la minería. LA PATRIA, también consultó a Baltazar, si Comibol era el intermediario en los pagos a la EMH, al respecto comentó que trataron de tener conversaciones con el presidente de la entidad, pero no tuvieron respuesta.
Los mineros de Huanuni determinaron que la única responsable por las pérdidas de la producción de la empresa es la EMV y ella debe asumir las consecuencias.
El problema entre la mina Huanuni y la metalúrgica de Vinto se agudizó el lunes 1 de diciembre, cuando tres dirigentes mineros buscaban la intermediación del prefecto, Alberto Luís Aguilar Calle, para que concrete una reunión con el ministro de Minas, el presidente de Comibol, y el gerente de la EMV, para resolver el conflicto, pero el prefecto arguyó que Echazú se encontraba en La Paz, hecho que fue desmentido por los mineros que constataron minutos antes de la reunión que Echazú se encontraba en ese momento en el edificio de la Prefectura.
EN LA PAZ
En La Paz, el ministro de Minería Alberto Echazú, convocó a los gerentes de ambas empresas, al presidente de la Comibol y a los responsables financieros para analizar el conflicto.
Un informe de esa repartición estatal afirma que las conversaciones continuarán hoy hasta lograr una solución que satisfaga a ambas partes.
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