Si bien estamos ante una crisis innegable en materia de precios para nuestros minerales y un registro que no tendrá variaciones ascendentes significativas en mucho tiempo, debido a las condiciones financieras que se manejan en la China con una desaceleración de su economía y por lo tanto una restricción en las operaciones de importación de materias primas por parte del coloso asiático la alternativa que deberá asumirse en los países productores de materia prima es la de inyectar capitales para incrementar los volúmenes de producción.
Naturalmente la referencia más real por proximidad y aplicación de medidas de emergencia la tenemos con los países vecinos, el Perú, Chile e inclusive la Argentina, donde si bien el descenso de precios preocupa de sobremanera, las decisiones de política gubernamental para fomentar e incentivar las grandes inversiones, de modo que la producción minera no decaiga o entre en crisis operacional.
En el caso boliviano ciertos márgenes operativos especialmente en la minería estatal, ponen en riesgo las tareas de extracción de minerales si esas tareas están por encima de los costos aceptables de producción con valor de precio que permita un mínimo de utilidad, pero en ningún caso pérdidas que obligarían al cierre de operaciones.
No hay que olvidar que la minería boliviana constituyó un largo periodo de la vida nacional en el soporte más importante de la economía nacional, las divisas recuperadas por las exportaciones de los minerales producidos en el occidente en los distrititos de Oruro y Potosí, permitieron sostener el Erario Nacional y distribuir tales ingresos para cubrir las necesidades del país y alentar el progreso de buena parte de la Nación. En el último tiempo el gas e hidrocarburos "tomaron la posta", contribuyendo igualmente el soporte de la economía nacional.
Un primer intento de entrar a la metalurgia se dio en Oruro, primero a través de una empresa privada y años después fue creada la Empresa Nacional de Fundiciones (ENAF) como un aporte hacia la industrialización del estaño que se convirtió en lingotes de alta pureza para ganar en su precio de exportación, sin embargo todavía no se ha dado el otro paso trascendental de utilizar esa materia prima metálica en su diversificación industrial.
Pródiga naturaleza
El paso del tiempo y cierto grado de investigación y la necesidad de ampliar los horizontes del desarrollo oriental, ha permitido establecer la existencia de un gran reservorio de hierro, el caso del Mutún, pero al mismo tiempo la comprobación de existencia de yacimientos auríferos, piedras preciosas y semipreciosas, recientemente se habla de la existencia de uranio y no se descartan otras opciones de explotación de otros minerales, inclusive los tradicionales como el estaño, la plata o el zinc con lo que el rubro minero se amplía hacia las cálidas tierras orientales.
Este hecho, que debe ser tomado en cuenta, justamente en la complicada circunstancia actual, en que el declive de los precios coloca a la minería frente a un desafió excepcionalmente coyuntural, es decir aplicar medidas urgentes para enfrentar la crisis de los precios, sabiendo que minerales no faltan, lo que se necesita son inversiones para encarar nuevos proyectos, en la vastedad del territorio nacional donde la prodiga naturaleza nos tiene guardadas en el suelo y subsuelo atractivos yacimientos mineros.
La minería y el PIB
En materia económica el sector de la minería tiene su participación importante en el crecimiento de la economía y ese valor se traduce en la contribución al Producto Interno Bruto (PIB) que el pasado año cerró en 6,78 %. De acuerdo a los datos más recientes, el segundo trimestre del año en curso la economía se desaceleró levemente registrando una baja de medio punto porcentual con relación a marzo pasado llegando a 5,10 %.
Los analistas señalan que la reducción del PIB se debe principalmente a la caída de las exportaciones mineras, por la reducción sostenida de los precios en los mercados internacionales. Los datos muestran que hasta agosto del 2014 las ventas de minerales crecieron levemente a 0,78 % respecto a igual periodo del 2013, al pasar de 1.309 millones a 1.319 millones de dólares.
Si bien los entendidos consideran que "no es riesgoso" el descenso del PIB, hay que tomar en cuenta que en el caso de las materias primas, también hay un bajón en el precio del petróleo que en nuestro país toca al gas, y de mantenerse en los próximos meses, sí puede tener incidencia en la economía general del país.
En todo caso en los niveles gubernamentales la idea es una rápida ejecución de la inversión pública, tomando en cuenta los gobiernos sub nacionales para llegar a las metas de sostenimiento de nuestra economía.
En cuanto a la minería específicamente no se menciona todavía un "plan de contingencia", aunque en el MMM se asegura que las inversiones serán incrementadas en los rubros de la prospección y exploración, tomando en cuenta la importancia de los proyectos en curso de operación y necesariamente los que puedan concretarse con nuevos planes de extracción de nuestros recursos minerales.
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