La puesta en marcha de la planta polimetalúrgica de Karachipampa está en riesgo debido a que la empresa Atlas Precious Metals no cumplió los plazos establecidos pues el 20 de febrero ya debió arrancar dicho proyecto.
Funcionarios de la Corporación Minera de Bolivia (Comibol) señalan que existen trabajos de adecuación y pruebas de los equipos pero no señalan cuándo arrancaría el proyecto. En Potosí, la empresa no cuenta con ejecutivos que puedan dar a conocer el cronograma de los trabajos que están encarando pero se sabe que la Atlas anunció que está a la espera de los equipos de la fundición de zinc que estaría viniendo al país por barco.
El funcionamiento de la planta de Karachipampa es fundamental para los productores potosinos pues podría abrirse un interesante mercado en este momento en el que sufren por las bajas cotizaciones y el cierre de los mercados para la producción minera local.
El presidente de la Asociación de Ingenios Mineros de Potosí (AIMP), René Cruz, señaló que el proyecto es muy importante para los potosinos pero en especial para los mineros que podrán internar las cargas mineralizadas en el mismo y lograr un precio justo.
Tanto los cooperativistas como los mineros chicos están a la expectativa de la puesta en marcha de la fundidora pero lamentan que exista retraso en los plazos establecidos, según indicó el presidente de la Cámara Nacional de Minería de Bolivia, Augusto Ramírez.
El dirigente indica que el Departamento podría entrar a la fase de transformación de la materia prima minera pues Karachipampa tiene la capacidad de sacar minerales de plomo, plata, bismuto y otros.
Las organizaciones mineras del Departamento tienen previsto consultar a las autoridades qué se está haciendo en lo que representa el proyecto Karachipampa así como la puesta en bolsa de las acciones de parte de la Atlas Precious Metals y cuánto recaudó para garantizar las inversiones.
El proyecto minero
Para el funcionamiento de la planta de Karachipampa se consolidó el riesgo compartido entre la Comibol (35 %) y Atlas Precious Metals (65 %).
Actualmente la fundición tiene la capacidad de tratar 51.100 toneladas anuales de plomo / plata y se podría subir a 62.000 toneladas cuando se complete un circuito junto a la planta para la lixiviación del zinc.
Con el circuito completado se producirá 70.000 toneladas anuales en placas de zinc, 30.000 toneladas anuales de lingotes de plomo y unos 10 millones de onzas de plata por año. También está prevista la recuperación de oro, cadmio, bismuto, cobre, estaño y de otros metales generando cada año 140.000 toneladas de ácido sulfúrico.
La planta
La planta de Karachipampa se encuentra a 3 kilómetros de la ciudad de Potosí y fue construida por la Corporación Minera de Bolivia (Comibol) en el período 1985 a 1988. No entró en funcionamiento por la falta de producción de concentrados de plomo en el país y tuvo un costo de 180 millones de dólares, según datos de la propia estatal minera.
La planta fue diseñada y construida por Klöckner, un alemán de ingeniería y empresa de construcción, con diseño basado en el estado del arte ruso Kivcet tecnología. Esa tecnología es de uso común en todo el mundo con usuarios como la Fundición de Trail Cominco en la Columbia Británica y de la Fundición de Glencore Porto Vesme en la isla de Sardenia, Italia
Funcionarios de la Corporación Minera de Bolivia (Comibol) señalan que existen trabajos de adecuación y pruebas de los equipos pero no señalan cuándo arrancaría el proyecto. En Potosí, la empresa no cuenta con ejecutivos que puedan dar a conocer el cronograma de los trabajos que están encarando pero se sabe que la Atlas anunció que está a la espera de los equipos de la fundición de zinc que estaría viniendo al país por barco.
El funcionamiento de la planta de Karachipampa es fundamental para los productores potosinos pues podría abrirse un interesante mercado en este momento en el que sufren por las bajas cotizaciones y el cierre de los mercados para la producción minera local.
El presidente de la Asociación de Ingenios Mineros de Potosí (AIMP), René Cruz, señaló que el proyecto es muy importante para los potosinos pero en especial para los mineros que podrán internar las cargas mineralizadas en el mismo y lograr un precio justo.
Tanto los cooperativistas como los mineros chicos están a la expectativa de la puesta en marcha de la fundidora pero lamentan que exista retraso en los plazos establecidos, según indicó el presidente de la Cámara Nacional de Minería de Bolivia, Augusto Ramírez.
El dirigente indica que el Departamento podría entrar a la fase de transformación de la materia prima minera pues Karachipampa tiene la capacidad de sacar minerales de plomo, plata, bismuto y otros.
Las organizaciones mineras del Departamento tienen previsto consultar a las autoridades qué se está haciendo en lo que representa el proyecto Karachipampa así como la puesta en bolsa de las acciones de parte de la Atlas Precious Metals y cuánto recaudó para garantizar las inversiones.
El proyecto minero
Para el funcionamiento de la planta de Karachipampa se consolidó el riesgo compartido entre la Comibol (35 %) y Atlas Precious Metals (65 %).
Actualmente la fundición tiene la capacidad de tratar 51.100 toneladas anuales de plomo / plata y se podría subir a 62.000 toneladas cuando se complete un circuito junto a la planta para la lixiviación del zinc.
Con el circuito completado se producirá 70.000 toneladas anuales en placas de zinc, 30.000 toneladas anuales de lingotes de plomo y unos 10 millones de onzas de plata por año. También está prevista la recuperación de oro, cadmio, bismuto, cobre, estaño y de otros metales generando cada año 140.000 toneladas de ácido sulfúrico.
La planta
La planta de Karachipampa se encuentra a 3 kilómetros de la ciudad de Potosí y fue construida por la Corporación Minera de Bolivia (Comibol) en el período 1985 a 1988. No entró en funcionamiento por la falta de producción de concentrados de plomo en el país y tuvo un costo de 180 millones de dólares, según datos de la propia estatal minera.
La planta fue diseñada y construida por Klöckner, un alemán de ingeniería y empresa de construcción, con diseño basado en el estado del arte ruso Kivcet tecnología. Esa tecnología es de uso común en todo el mundo con usuarios como la Fundición de Trail Cominco en la Columbia Británica y de la Fundición de Glencore Porto Vesme en la isla de Sardenia, Italia
No hay comentarios:
Publicar un comentario