Según José Gallardo, director jurídico de la empresa india, el desfase se debió al pedido de los 10 millones de metros cúbicos diarios de gas para la generación de 550 megavatios, que es lo que necesita para poner en funcionamiento el proyecto.
Asimismo, el directivo de la Jindal, Arvind Sharma, anunció que su empresa seguirá en territorio boliviano y espera que en las negociaciones lleguen a un acuerdo con el gobierno.
Por su parte, el directivo de la Empresa Siderúrgica del Mutún (ESM), Ignacio Barbery, exige que se den las reuniones con la Jindal para iniciar las negociaciones y fiscalizar el trabajo en el Mutún.
Señaló que el ministerio de Minería está "subalternizando" el trabajo del directorio de la ESM.
"El tema que molesta es que quieren subalternizar al directorio de la ESM", puntualizó.
Envían puntos para negociar. Gallardo manifestó que dieron a conocer diferentes puntos a la ESM para que se pongan en consideración, ya que señalan que son "indispensables". Evitó entrar en detalles, debido a lo delicado del caso.
"De manera genérica, los puntos son las condiciones que Jindal necesita para seguir operando en el día, pero en los detalles no quisiera entrar porque no corresponde. El gas es uno de los temas", destacó.
Además, Gallardo recalcó que no se han reunido aun para analizar las propuestas en la provisión de gas con la estatal YPFB y dijo que las condiciones dependerán de la cantidad que se disponga para el trabajo en el Mutún.
Definir el riesgo compartido. Ignacio Barbery, representante de la ESM por Puerto Suárez, dijo que se tiene que definir el contrato de riesgo compartido con la ESM y Jindal.
Además criticó que se le continúe realizando un proceso en contra de varios directivos de la Jindal, lo que afecta su trabajo.
Esperan las reuniones. Por su parte, el presidente del Comité Cívico de Puerto Suárez, José Luis Santander, dijo previamente que esperan que se reúnan para que haya algo claro.
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