A mediados del año pasado, Codelco presentó a La Huifa, un yacimiento con un potencial de 200 millones de toneladas, con una ley de 1 a 0,8 % de cobre total.
Como se ubica a tres kilómetros de distancia en línea recta de El Teniente, La Huifa sería económicamente rentable para la empresa estatal.
¿Pero cómo es el proceso que lleva a una propiedad minera a convertirse en un yacimiento?
El proceso es largo y, dice Pesce, puede demorar fácilmente hasta dos
décadas.
Tampoco es fácil. Si bien no existen estadísticas oficiales de cada cuánto tiempo se descubren yacimientos, en la gran minería privada se cuenta con dos premisas: ya no existen grandes yacimientos ubicables de manera superficial, y cada 20 años se encuentran lugares con potencial económico para la construcción de grandes yacimientos en el país.
Esto, partiendo de la idea de que donde existen yacimientos, también existen fallas, por lo que cerca de las vetas ya probadas, hay otras que aún no se conocen, explica Javier Rojas, director de exploración de la empresa especializada Santiago Metals.
Una idea recurrente en la minería es que existe una "otra mitad" de Chuquicamata, que nadie ha encontrado aún. Aquí se ha ido el 70% de la inversión en exploraciones de Codelco. Desde 2010 a la fecha, la compañía ha descubierto cuatro mineralizaciones importantes: La Americana, Cerro Negro y Copa Sur en la División Andina, y La Huifa en El Teniente.
El Mercurio
No hay comentarios:
Publicar un comentario