La bonanza de precios internacionales se acabó, por lo que Bolivia está viviendo una caída lenta del precio de los minerales y hay que prepararse para tiempos “muy difíciles”, dijo ayer el director ejecutivo de la Fundación Milenio, ayer Napoleón Pacheco, en la presentación del Informe sobre la Economía 2013.
Añadió que el impacto será muy fuerte en el país porque no se invirtió en exploración y desarrollo de yacimientos, además, el sector más perjudicado será el de los cooperativistas por la baja rentabilidad de sus áreas de trabajo.
“Ya pasó la época de bonanza, ya no vamos a tener un precio del estaño, por ejemplo, que esté cercano a los 15 dólares por libra fina”, sostuvo Pacheco y recordó que las bajas cotizaciones de los minerales precipitaron el cierre de la Corporación Minera de Bolivia (Comibol), la quiebra de la minería estatal en Bolivia y la relocalización de 25 mil mineros.
Refirió que la caída del precio de los minerales se explica por el crecimiento moderado de la economía China así como por la europea que está estancada y por la leve recuperación en EEUU.
La tendencia hacia la baja en los precios de los minerales afectará la economía boliviana a breve plazo debido a que muchos yacimientos marginales dejarán de ser rentables y los más afectados serán los cooperativistas mineros, añadió.
Además, la caída de los precios será “fatal” en Bolivia, debido a que la inversión pública en exploración fue nula y muy escasa en desarrollo de proyectos, al extremo que no existen nuevos emprendimientos mineros.
Para ilustrar su afirmación, señaló que en Perú, Argentina, Chile y Brasil las inversiones en exploración y desarrollo de yacimientos mineralógicos suman miles de millones de dólares; mientras que la última gran operación minera en Bolivia data de los años 90 con San Cristóbal.
Por otra parte, Pacheco dijo que el nivel de las Reservas Internacionales Netas (RIN), que al 31 de marzo superan los 1.450 millones de dólares, garantizan la estabilidad del dólar en Bolivia, siempre y cuando no haya conmociones fuertes, como por ejemplo un aumento de las tasas de interés en Estados Unidos.
“Si no hay conmociones fuertes, es un nivel de reservas que le va permitir al Banco Central de Bolivia (BCB) mantener estable el tipo de cambio; pero eso en el corto plazo, considerando que los países vecinos vienen haciendo ajustes al tipo de cambio y esa situación podría generar un contexto nada apropiado para mantener el tipo de cambio”, afirmó.
Cambios externos
A pesar de que las buenas cifras macroeconómicas para el país, las condiciones externas están cambiando debido a un descenso general en el precio de las materias primas y porque EEUU reduce su programa de apoyo monetario a la economía mundial (comprando menos deuda), lo que podría generar un nuevo escenario económico, señaló el director ejecutivo de Milenio, Napoleón Pacheco.
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