Jindal Steel Bolivia (JSB) firmó el convenio de riesgo compartido con el Estado en 2007 e inició operaciones en el país.

¿Cómo inició sus operaciones la Jindal en el país?
El convenio establece que el Estado nos entregaría las tierras, nos daría gas, facilitaría las tierras y energía eléctrica para desarrollar todo el complejo siderúrgico. Entonces, el primer problema que hemos enfrentado fue la posesión de tierras y la propiedad de las tierras. El 22 de septiembre de 2010, el Gobierno nos ha entregado parcialmente las tierras, aún hay más predios que debe entregarnos.
¿Qué volumen ha exportado la JSB?
Hemos hecho un primer contrato  de 10.000 toneladas que van a salir a Paraguay, de las cuales 4.800 toneladas (t) han sido embarcadas. Tenemos una barcaza con capacidad de un millón de toneladas de mineral de hierro listas para su exportación, y tenemos 60.000 toneladas ubicadas en Puerto Aguirre listas para su embarque. Tenemos previsto que para 2012 se inicie la exportación de un millón de toneladas por año.
¿Qué papel cumple la JSB?
La labor de la Jindal no es la minería. El negocio de la empresa y la razón por la que estamos en este país es para industrializar el hierro, usando gas, pero debo ser enfático en esto, porque hoy en día el gas boliviano va al Brasil para dar energía a las fundiciones en Brasil de acero y luego el acero fundido, a través de lo que es el fierro de construcción, los perfiles de acero, vuelve a Bolivia, pero el valor agregado se queda en Brasil.
Nosotros, a través de la industrialización del hierro en Bolivia, vamos a producir el hierro, empleo y generar abastecimiento al mercado interno y la exportación.
¿Pagó ya la empresa las regalías por el volumen vendido?
De lo que ya comercializamos, pagamos las regalías antes de exportar. Como Bolivia nunca había hecho ese tipo de comercio, fue complicado calcular el valor de las regalías; producto de la minería del hierro vamos a pagar regalías y ya lo estamos haciendo, que irán a favor del Tesoro General del Estado, la Gobernación de Santa Cruz, en beneficio de los municipios que están cercanos al proyecto, como son Puerto Suárez, Puerto Quijarro y El Carmen Rivero Torres.
¿Cuál es la inversión hecha hasta ahora por la JSB?
Al 30 de septiembre, Jindal Steel Bolivia ha invertido 300 millones de dólares fundamentalmente en la compra de plantas, como ser la de pelets y la planta de reducción directa, que se llama DRI.
Tenemos programado que para el 30 de abril vamos a exceder de los 600 millones de dólares de inversión. El proyecto está en marcha, está en su máxima actividad, prueba de ello hay una gran producción minera, ya hay una exportación, ya hemos comprado las plantas y ya tenemos toda la logística para la llegada de nuestros equipos y empezar a instalar.
¿Cómo es el comportamiento del Gobierno hacia la JSB?
El gran cuestionamiento que hoy se presenta es si existe el gas suficiente en el país o no para poder industrializar el hierro del Mutún.
¿Para qué necesita y cuál es el volumen de gas que demanda la Jindal Steel Bolivia?
El requerimiento de Jindal es de seis millones de metros cúbicos de gas diarios en la primera etapa, que va de 2014 hasta 2016, la segunda empieza en 2017, donde entramos en una producción mucho más intensa porque requerimos 10 millones. Los requerimos para generar 500 megavatios.
Las frases
“No queremos opinar  sobre lo que dijo el Ministro de Hidrocarburos, pero creemos que estamos en el momento crítico, porque si Jindal se va, nadie querrá invertir más en Bolivia”.
“Estamos en el momento en el que la Jindal Steel Bolivia necesita apoyo del Estado al honrar el contrato de riesgo compartido y facilitar el gas que necesitamos”.
"Todos los que tienen un empleo fijo y un salario fijo han visto que los ingresos no han crecido y se ha erosionado su poder de compra; entonces, hay una mala distribución en la economía boliviana”.
Napoleón Pacheco / FUNDACIÓN MILENIO