El titular de minería y metalurgia, César Navarro, admitió estar preocupado por el ritmo de actividades que se cumplen en el Empresa Metalúrgica de Karachipampa, EMK, señalando que desde su posesión en abril, observó que algo no se desarrolla con efectividad en la gigante estructura que hace décadas no funciona pero sigue gastando dineros del Estado. Frente a esa situación la autoridad señaló que se exigió a personal chino que se hizo cargo de la última fase de rehabilitación del complejo, para que se concluya esa etapa y comience la producción. Se confirmó que ocho días atrás, ahora son más de 15, se comenzó el calentamiento del horno Kivcet, aspecto que constituye el primer paso para su funcionamiento y la puesta en marcha de la EMK, que ya debía estar en plena producción, toda vez que se han cumplido las reparaciones y el cambio de repuestos que se dañaron, cuando se encendió el horno sin tomar ciertas previsiones técnicas que observaron los técnicos chinos.
El último informe de la autoridad ministerial, señala que la temperatura del horno Kivcet llegó a 1.300 grados centígrados y era cuestión de 50 más para llegar al nivel aceptable para comenzar el proceso de fundición de minerales, lo que permitirá por vez primera en el país la obtención de lingotes de plomo con alta calidad, en otro proceso hacia la industrialización minera.
Otro problema que confrontaba el "elefante blanco" para comenzar a caminar, era la dotación suficiente de agua, aspecto que también alcanzó solución, con un acuerdo entre la empresa acuífera potosina, Apos y autoridades de Comibol con lo que se eliminarían los contratiempos, que siguen demorando la puesta en marcha de la gigante estructura metalúrgica conocida como elefante blanco por su costoso mantenimiento y poca utilidad práctica. El ministro se mostró optimista luego de observar directamente el calentamiento del Kivcet.
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