Alrededor de 10 mil toneladas de concentrados de plata extraídos por ocho cooperativas que trabajan en yacimientos de Tacobamba no pueden ser procesados por el cierre de los ingenios que no tienen licencia ambiental, informó ayer el presidente de la Cooperativa San Felipe de Colavi, Alberto Gallardo. Estos piden que la Gobernación potosina dé un plazo a las mineras para hacer el trámite.
Gallardo refirió que alrededor de 1.500 trabajadores de las ocho cooperativas mineras que operan en la zona se declararon en estado de emergencia por las pérdidas económicas que están sufriendo, debido a que no saben dónde procesar sus concentrados de plata.
“Los daños económicos que estamos sufriendo los 1.500 trabajadores del sindicato San Felipe de Colavi, por ejemplo, son enormes, tenemos concentrados de plata que no podemos procesar, ni tampoco comercializar con los bancos o rescatadoras de minerales, porque no hay ingenios que funcionen en la zona de Colavi”, explicó.
Dijo también que en similar situación se encuentran otras siete cooperativas mineras que, en conjunto, tienen algo más de 10 mil toneladas de concentrados de plata “que están durmiendo” en sus depósitos desde hace 20 días, aproximadamente, fecha en la que los ingenios mineros dejaron de funcionar al ser suspendidos por la Gobernación de Potosí.
“Muchos de nuestros compañeros están migrando a otros lugares, otros están retornando a sus chacras para la cosecha; pero los más están esperando una solución de parte de la Gobernación, porque no tienen recursos ni para viajar a la ciudad de Potosí”, sostuvo.
Señaló que, el pasado fin de semana, las ocho cooperativas mineras que trabajan en la zona de Tacobamba, provincia Cornelio Saavedra de Potosí, plantearon a la Gobernación de Potosí resolver el problema a través de dos propuestas: agilizar los trámites para que los ingenios obtengan cuanto antes sus licencias ambientales o habilitar temporalmente el funcionamiento de los ingenios hasta que salgan las licencias ambientales.
Anunció que si hasta fin de semana la Gobernación no viabiliza una solución al problema, optando por una o las dos propuestas, la próxima semana se trasladarán a la ciudad de Potosí donde asumirán las medidas de protesta que más convengan. “Si el problema persiste por una semanas más, el sector cooperativo podría sufrir una relocalización de actividades, con el consiguiente abandono y cierre de yacimientos e incluso venta de activos como equipos y herramientas, tal como sucedió el año 1986 con las minas de la Comibol”, comentó.
Consultado sobre la posibilidad de enviar todos los concentrados a ingenios de mayor capacidad en la capital potosina para su tratamiento y comercialización, dijo que, por los gastos de transporte en los más de 50 kilómetros entre Tacobamba y la Villa Imperial, el costo operativo no se justifica.
Ni el gobernador de Potosí, Félix Gonzales, ni la secretaria de la Madre Tierra, Ivana Bellido, atendieron ayer a este medio para conocer su posición respecto al conflicto.
Gallardo informó que con el cierre temporal de los ingenios mineros en la zona de Tacobamba, no solamente los cooperativistas mineros se vieron afectados, sino también unos 200 trabajadores que prestaban servicios en esos ingenios.
Fedecomin sin datos
Desde la Federación Departamental de Cooperativas Mineras de Potosí (Fedecomin) se informó ayer que la dirigencia aún no tomó conocimiento oficial de la problemática de las ocho cooperativas mineras de la zona de Tacobamba que no pueden comercializar sus concentrados de plata porque no están funcionando los ingenios de la zona.
“No tengo denuncia ni informe cabal de lo que está sucediendo con estas cooperativas”, dijo a este medio su ejecutivo Carlos Mamani; pero confirmó que los ocho ingenios de la zona no están prestando ningún servicio desde hace 20 días.
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