De acuerdo a las proyecciones de orden productivo internacional que han sido observadas en los niveles nacionales, especialmente para la actividad minera se prevé un ciclo favorable del quinquenio inmediato.
Las condiciones de los mercados internacionales de minerales, si bien pueden tener variables temporales de fluctuación por efecto de los cambios en oferta y demanda de los grandes países industrializados, la compra de materias primas seguirá siendo una constante comercial, allí donde se necesita impulsar la fabricación de diversos materiales.
Bajo esa alternativa en el Ministerio de Minería del país se proyectan cinco años más de bonanza para el sector extractivo minero, en base a precios altos que inclusive permitan a nuestro país alcanzar un récord de exportaciones.
Lo importante es que se hagan absolutamente favorables todas las condiciones para mejorar la producción minera nacional, eso quiere decir, facilitar más inversiones, con mayor seguridad jurídica, con incentivos especiales para los industriales de la minería en general, es decir la privada, la cooperativizada y por supuesto la estatal, las que podrán desarrollar importantes proyectos de alto rendimiento en extracción de recursos minerales.
Los planes por lo menos en el sector estatal, señalan buenas perspectivas para explotar minerales como el estaño, plomo, cobre, zinc, ulexita y algunos otros cuyos precios se mantienen en niveles invariables y favorecen a las expectativas de los inversionistas y productores mineros.
Los informes procedentes del Ministerio de Minería y Metalurgia (MMM) resultan alentadores al señalar que sólo en el primer semestre del año en curso nuestras exportaciones mineras se elevaron en un 45 por ciento con relación a igual periodo del año pasado.
Por otra parte en la Comibol se manejan otras cifras interesantes que están relacionadas con los índices de producción minera en el sector estatal y refieren que en la gestión presente (2011) se podría superar el récord de ventas de 2 mil 405 millones de dólares que se alcanzó el 2010, lo que significa que se pasará el nivel – óptimo – de los 2.500 millones de dólares.
Bajo esas alternativas el próximo quinquenio puede ser de beneficio para el sistema productivo minero nacional, situación que además se vería favorecida si el nuevo proyecto de ley sectorial, incluye más incentivos y menos restricciones para los operadores mineros en conjunto.
Los planes deberían ser coordinados en una instancia interinstitucional que permita consensuar ideas y acometer concertadamente las gestiones que fueran necesarias para asegurar la llegada de capitales y tecnología.
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