Para remontarnos en el tiempo y en reversa lo que pasó con el intento de explotar el litio de Uyuni a través de la Lithium Company, durante el Gobierno de Jaime Paz Zamora, simplemente se diluyó como la sal cuando toma contacto con el agua. Una posición cívica, más chauvinista que técnica obligó al término de una operación que apenas comenzaba y que luego se trasladó a la Argentina donde impulsó la explotación de litio en ese país.
En el último tiempo, por lo menos cinco años atrás, toma movimiento el valor del litio a nivel internacional y ese hecho despierta el interés de inversores especializados en la urgente explotación de las reservas mundiales, ubicando a Bolivia como el lugar más apropiado para esos fines.
Surgieron interesantes propuestas y en los últimos dos años las mismas se han convertido en un asedio al gobierno para que tome decisiones y conforme una sociedad estratégica que no sólo permita explotar litio sino también industrializarlo, de tal modo que se llegue al objetivo de la fabricación industrial de baterías de “lithium” para energizar los nuevos automóviles que descartan los combustibles óseos.
En materia de contactos existe una proficua tarea especialmente por parte de los interesados en mostrar las ventajas de sus propuestas, la tecnología que poseen, las posibilidades de inversión y lo que es más importante en las condiciones más próximas a la predisposición gubernamental de Bolivia de tener “socios y no patrones”.
Observando las cosas como están, ciertamente se están dando las condiciones más favorables para encarar el gigante proyecto de explotación del litio en los dos importantes salares de nuestro país, el de Uyuni en jurisdicción de Potosí y Oruro y el de Coipasa, exclusivamente en Oruro.
Ese tema de la jurisdicción territorial del salar de Uyuni ha despertado algunas actitudes exacerbadas por parte de dirigentes cívicos de Potosí, reclamando una propiedad absoluta del Salar de Uyuni, queriendo desconocer una delimitación histórica que comprende parte de la misma en el territorio de Oruro. Se estima que esa controversia no debe alterar los planes mayores que en su momento deben aprobarse para explotar esa riqueza natural boliviana.
Autoridades y dirigentes cívicos de los dos distritos han avanzando algo en las futuras negociaciones sobre el caso de límites, entendiendo que en el momento necesario las decisiones tendrán un objetivo exclusivamente nacional y de ningún modo sectorial. Una institución ha sugerido que la explotación del litio debe ser coordinada entre Potosí, Oruro y el Gobierno central. Es la preocupación de los trabajadores mineros cooperativistas.
A propósito del sector de los cooperativistas recientemente se ha conocido, lo que significaría un “globito de ensayo”, el interés del sector en el futuro proyecto del litio, situación que ha despertado a su vez suspicacia entre otros sectores de trabajadores mineros esperanzados en ser parte del gigante proyecto del litio.
AVANCES
Dos proyectos, ambos respaldados con disposiciones legales, están avanzando en el proyecto del litio, son dos plantas de experimentación una en cada salar, es decir en Uyuni y en Coipasa, con fines de establecer condiciones favorables para ingresar luego a la fase de una masiva explotación.
En el caso de Oruro se ha dispuesto una inversión cercana al medio millón de dólares para desarrollar un estudio responsable sobre la potencialidad de los recursos evaporíticos que tenga Coipasa. Un reciente evento que impulsó la Facultad de Ingeniería en Oruro (FNI) permitirá conocer técnicamente las condiciones más favorables para explotar el Salar de Coipasa.
ALERTA
Sin embargo de las actividades que se cumplen actualmente en los dos salares bolivianos hay algo que debe preocupar a nuestras autoridades y es que en la medida que demoramos en definir un proyecto para explotar el litio, otros países avanzan raudamente en los mismos fines, caso de Chile e inclusive la Argentina donde sus proyectos están más avanzados que los nuestros, por lo menos en Chile ya se ha dado el paso de industrializar su litio.
Pero eso no es todo, lo que sucede es que además se menciona como hechos concretos la ubicación de nuevos, gigantes y poderosos yacimientos de litio, fue el caso de México que actualmente trabaja seriamente en implementar su planta de tratamiento.
Surge ahora la información sobre la prospección exitosa que se ha hecho de otro salar de característica mundial y que se ubica en Finlandia, donde también se adoptarán las medidas más urgentes para desarrollar los proyectos de explotación e industrialización de esos recursos naturales.
En nuestro medio seguimos en los prolegómenos iniciales de querer convertirnos en una potencia energética con el caso del litio, pero sin dar las facilidades que merece particularmente para captar inversiones en las mejores condiciones.
Lo que necesitamos es la transferencia de tecnología y las ofertas ya se han manifestado como de la Bolloré de Francia, el marcado interés de Sur Corea, pasando por las ofertas de empresas asiáticas el caso de Japón y sus industrias automotrices, pero en el mismo nivel también la China e incluso el mismo país vecino de Chile y otro de más arriba como Venezuela están pendientes de una decisión de nuestro gobierno para emprender ese proyecto.
Afganistán se presenta como otra importante potencia de litio en el mundo y sus reservas que han sido cuantificadas preliminarmente, señalan que se convertirán en las importantes a nivel mundial. Claro que para el ejecutivo de los recursos Evaporíticos en nuestro país eso no significa nada, pues en todo caso el nuevo reservorio estaría en condiciones de explotarse en no menos de 10 años. Esta apreciación nos hace pensar en cuál es el tiempo real que se precisa en nuestro país, para emprender el proyecto del litio…?
Ese tema de la jurisdicción territorial del salar de Uyuni ha despertado algunas actitudes exacerbadas por parte de dirigentes cívicos de Potosí, reclamando una propiedad absoluta del Salar de Uyuni, queriendo desconocer una delimitación histórica que comprende parte de la misma en el territorio de Oruro. Se estima que esa controversia no debe alterar los planes mayores que en su momento deben aprobarse para explotar esa riqueza natural boliviana.
Autoridades y dirigentes cívicos de los dos distritos han avanzando algo en las futuras negociaciones sobre el caso de límites, entendiendo que en el momento necesario las decisiones tendrán un objetivo exclusivamente nacional y de ningún modo sectorial. Una institución ha sugerido que la explotación del litio debe ser coordinada entre Potosí, Oruro y el Gobierno central. Es la preocupación de los trabajadores mineros cooperativistas.
A propósito del sector de los cooperativistas recientemente se ha conocido, lo que significaría un “globito de ensayo”, el interés del sector en el futuro proyecto del litio, situación que ha despertado a su vez suspicacia entre otros sectores de trabajadores mineros esperanzados en ser parte del gigante proyecto del litio.
AVANCES
Dos proyectos, ambos respaldados con disposiciones legales, están avanzando en el proyecto del litio, son dos plantas de experimentación una en cada salar, es decir en Uyuni y en Coipasa, con fines de establecer condiciones favorables para ingresar luego a la fase de una masiva explotación.
En el caso de Oruro se ha dispuesto una inversión cercana al medio millón de dólares para desarrollar un estudio responsable sobre la potencialidad de los recursos evaporíticos que tenga Coipasa. Un reciente evento que impulsó la Facultad de Ingeniería en Oruro (FNI) permitirá conocer técnicamente las condiciones más favorables para explotar el Salar de Coipasa.
ALERTA
Sin embargo de las actividades que se cumplen actualmente en los dos salares bolivianos hay algo que debe preocupar a nuestras autoridades y es que en la medida que demoramos en definir un proyecto para explotar el litio, otros países avanzan raudamente en los mismos fines, caso de Chile e inclusive la Argentina donde sus proyectos están más avanzados que los nuestros, por lo menos en Chile ya se ha dado el paso de industrializar su litio.
Pero eso no es todo, lo que sucede es que además se menciona como hechos concretos la ubicación de nuevos, gigantes y poderosos yacimientos de litio, fue el caso de México que actualmente trabaja seriamente en implementar su planta de tratamiento.
Surge ahora la información sobre la prospección exitosa que se ha hecho de otro salar de característica mundial y que se ubica en Finlandia, donde también se adoptarán las medidas más urgentes para desarrollar los proyectos de explotación e industrialización de esos recursos naturales.
En nuestro medio seguimos en los prolegómenos iniciales de querer convertirnos en una potencia energética con el caso del litio, pero sin dar las facilidades que merece particularmente para captar inversiones en las mejores condiciones.
Lo que necesitamos es la transferencia de tecnología y las ofertas ya se han manifestado como de la Bolloré de Francia, el marcado interés de Sur Corea, pasando por las ofertas de empresas asiáticas el caso de Japón y sus industrias automotrices, pero en el mismo nivel también la China e incluso el mismo país vecino de Chile y otro de más arriba como Venezuela están pendientes de una decisión de nuestro gobierno para emprender ese proyecto.
Afganistán se presenta como otra importante potencia de litio en el mundo y sus reservas que han sido cuantificadas preliminarmente, señalan que se convertirán en las importantes a nivel mundial. Claro que para el ejecutivo de los recursos Evaporíticos en nuestro país eso no significa nada, pues en todo caso el nuevo reservorio estaría en condiciones de explotarse en no menos de 10 años. Esta apreciación nos hace pensar en cuál es el tiempo real que se precisa en nuestro país, para emprender el proyecto del litio…?
Ya es tiempo de que se dé muestras responsables de acometer el proyecto del litio en Bolivia si no queremos perder “el tren del progreso” que puede irse hacia otras latitudes donde también hay litio en gran cantidad.
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