Las cooperativas mineras empiezan a aceptar decretos

Los cinco decretos aprobados, el jueves 1 de septiembre para reestructurar el sector cooperativo minero, serán aplicados de manera gradual, no abrupta, además la legitimidad de todas esas disposiciones fue reconocida por Kami, la segunda cooperativa más antigua del país.

Toda esa situación la hizo conocer ayer el Viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales, en el programa El Pueblo es Noticia, que se emite por Bolivia TV y la Red Patria Nueva.

Rada estimó en 800 la cantidad de cooperativas, el dato exacto lo tiene el Ministerio de Minería. Asimismo, dijo que el Gobierno en reiteradas oportunidades solicitó a la Federación Nacional de Cooperativas Mineras (Fencomin) que clasifique y separe lo que son las cooperativas de las empresas.

Que identifique a las “que disfrazadas de cooperativas son empresas capitalistas semiformales”, sin embargo “nunca lo hicieron, nos decían sí lo vamos a hacer pero lo postergaban, prueba de que Fencomin representaba intereses patronales”.

reconocimiento de kami
La Cooperativa Kami, en Cochabamba, que se formó en 1962, se reunió para analizar los decretos y aprobó una resolución que dice “no nos oponemos al contenido de los decretos, seguramente Kami mantiene la esencia del cooperativismo, saben que son decretos justos, correctos, que la ciudadanía ha recibido muy bien porque tienen mucha legitimidad”.

Para Rada el Decreto 2892 que reconoce todos los derechos laborales y sociales del sector asalariado cooperativista es el más trascendental, porque establece que todos los trabajadores bajo cualquier modalidad de y forma de pago (efectivo, alimentos o mineral) se incorpora a la Ley General del Trabajo (LGT) con todos los derechos laborales.

El Viceministro explicó que aseguran ser más de 140 mil cooperativistas, pero de esa cantidad apenas un pequeño número son patrones (10 mil son socios), y los demás son como los denominan ‘segundas manos’, jornaleros o trabajadores a destajo, es decir más de 100 mil que serán incorporados a la LGT, “se corrige una injusticia”.