El Gobierno no puede entregar oficialmente el yacimiento rico en indio Mallku Khota a la Corporación Minera de Bolivia (Comibol) porque los dos sectores de comunarios aún están enfrentados, además exigen que el Estado los contrate en cantidades que sobrepasan lo necesario para actividades de prospección y exploración.
El presidente de la estatal minera, Héctor Córdova, explicó a Página Siete que “todavía no hay condiciones, estamos en reuniones con los comunarios y ellos mismos nos dicen que no entremos (a Mallku Khota) todavía porque es peligroso”.
Las previsiones del Gobierno señalaban días de la pasada semana para realizar dicha entrega, pero el acto es pospuesto de forma constante. La última decisión era llevarla adelante hoy, pero esta decisión también fue cambiada.
Según el Ejecutivo, los comunarios “están pidiendo evidentemente trabajo”, aparte de otras propuestas.
Este medio accedió a información que revela que las comunidades de los alrededores del yacimiento que pedían la nacionalización exigen inclusive 4.000 empleos, mientras que aquellas que apoyaban la reversión a manos de Comibol solicitan 800.
Córdova argumentó que en las operaciones de prospección y exploración sólo serán necesarios, como máximo, 100 trabajadores además de técnicos de Comibol.
Por otro lado, la estatal de minería hizo contacto con la Compañía Minera Mallku Khota para dialogar sobre la entrega de los estudios que ésta avanzó mientras estuvo a cargo del depósito ubicado en el norte del departamento de Potosí. (NV)
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