Los cooperativistas se encuentran en emergencia y exigen medidas para afrontar la crisis.
En un año el precio internacional del zinc se desplomó de 1,32 dólares a 0,59 dólares la libra fina y el Gobierno recién prepara un plan de contingencia para hacer frente a la crisis que amenaza con paralizar las operaciones mineras en el país.
El zinc es el principal mineral de exportación de Bolivia y en el primer semestre se logró acomodar en los mercados asiáticos y europeos cerca de 400 millones de dólares.
Las ventas totales ascendieron a 991 millones de dólares, mientras que la producción minera alcanzó un valor de 1.068 millones de dólares.
El sector minero creció gracias a la bonanza de precios altos en 64 por ciento, y su contribución al Producto Interno Bruto (PIB) que se expandió en 6,5 por ciento fue del 2,6 por ciento.
Entre otros minerales, el estaño descendió en su cotización de 10,4 dólares la libra fina en julio a siete dólares en octubre. Las divisas provenientes de su venta al exterior alcanzaron los 114 millones de dólares.
El precio de la plata disminuyó de 17,8 dólares a 11,7 dólares la onza troy en el mismo periodo, y el del plomo cayó de 1,69 dólares la libra fina hace un año a 0,72 dólares, y son los rubros que más se vendieron después del zinc y el estaño.
El ministro de Minería, Carlos Echazú, informó ayer que esa cartera de Estado elabora un plan para afrontar la caída de los precios que será puesto a consideración del presidente Evo Morales en los próximos días.
Adelantó que la estrategia pone especial énfasis en el zinc, que es el mineral que más empleo genera en el país, aunque no precisó detalles.
Este mineral se cotizó ayer en 0,59 dólares la libra fina, ratificando la tendencia de descenso porque a principios de mes se valorizaba en 0,74 dólares.
Fuentes del sector confirmaron que el plan consiste en la compra estatal de la producción de las cooperativas y de los mineros chicos a un precio razonable que aún esta por definirse.
Esto con el dinero de un fondo que será puesto en vigencia para superar la contingencia.
La producción será estocada o almacenada y comercializada por la Corporación Minera de Bolivia (Comibol) una vez que se recuperen los precios internacionales de la materia prima.
El Gobierno aún evalúa cuánto puede durar la caída, los recursos que se canalizarán al fondo y los almacenes donde se resguardará el mineral, que debe considerar todos los cuidados medioambientales del caso. Esto para evitar que el mineral se humedezca, se filtre por el subsuelo o se esparza con el viento y que cuente con todas las medidas de seguridad a fin de evitar robos.
Echazú negó una eventual subvención y aseguró que la propuesta que tiene en análisis garantiza la producción y el empleo.
“Esperamos que la caída de ingresos no sea prolongada, nuestra propuesta es una medida no coyuntural, sino sostenida en el tiempo, que contribuya a mantener la producción sobre todo de productores chicos y de los cooperativistas”.
El presidente de la Cámara Nacional de Minería (Canalmin), Ramiro Aguilar, opinó que la reacción del Gobierno es tardía porque el sector ya comenzó a sentir los efectos de la caída de precios, por lo que varias empresas están por cerrar operaciones y despedir a sus empleados.
En Potosí, los ingenios alistan cartas de preaviso y las repercusiones de la crisis se manifiestan en la disminución de los precios de los bienes inmuebles.
Aguilar demandó la pronta vigencia del Fondo de Desarrollo Minero (Fodemin) que cuenta con un millón de dólares para que ser canalizado a los productores. Este fondo fue comprometido por el Poder Ejecutivo pero hasta la fecha no funciona, pese a que puede apoyar al sector en esta coyuntura de bajos precios.
Canalmin teme por el cese de operaciones del sector, ya que cada uno de los empresarios chicos tiene la posibilidad de generar empleo para otros diez.
La Federación de Cooperativas Mineras (Fencomin) se declaró en emergencia por el descenso de las materias primas, mientras que sus afiliados en Potosí anuncian medidas de presión.
El Presidente de la Federación Departamental de Cooperativas Mineras (Fedecomin) informó que hoy se llevará a cabo un ampliado nacional en el que se decidirán las acciones. En el Cerró Rico hace poco trabajaban 19.000 mineros, pero ahora se desconoce cuántos quedan.
El asesor de Fencomin, Ramiro Paredes, considera que la compra de la producción por parte del Estado puede ayudar al sector.
No se evaluó bien el impacto
El asesor de la Federación de Cooperativas Mineras de Bolivia (Fencomin), Ramiro Paredes, admitió que la caída de precios de los minerales en el mercado internacional “encontró” a todos los sectores desprevenidos porque no se pensó que el efecto sería tan inmediato.
Opinó que “no hubo el olfato necesario” para evaluar mejor la tendencia, pues a diferencia del zinc, que es el mineral que más disminuyó su precio, hasta el primer semestre del año el resto tenía una mejora.
Paredes afirmó que el país debió prepararse a través de un mayor fomento del Estado a la exploración de nuevos yacimientos, pues los que existen en la actualidad se encuentran agotados. De esa forma se podía haber compensado la crisis con una mayor producción.
Otra medida que no se logró implementar fue un Fondo de Estabilización con el aporte de todos los sectores en época de precios altos para afrontar periodos de “vacas flacas”.
Exploración
El ex ministro de Minería Jorge Espinoza opinó que para enfrentar la crisis, la Corporación Minera de Bolivia (Comibol) debe encarar un agresivo programa de exploración y aumentar la producción.
Según la ex autoridad, la estatal minera cuenta con al menos 100 millones de dólares disponibles de los ingresos que obtiene de sus contratos de riesgo compartido y arrendamiento de las minas de Colquiri, Bolívar y la explotación de Huanuni que está bajo su administración.
Otra medida que se puede implementar —dijo— es la revisión de la carga tributaria que es muy alta, pues actualmente el Impuesto Complementario a la Minería (ICM) ya no es acreditable al Impuesto a las Utilidades de las Empresas.
En un año el precio internacional del zinc se desplomó de 1,32 dólares a 0,59 dólares la libra fina y el Gobierno recién prepara un plan de contingencia para hacer frente a la crisis que amenaza con paralizar las operaciones mineras en el país.
El zinc es el principal mineral de exportación de Bolivia y en el primer semestre se logró acomodar en los mercados asiáticos y europeos cerca de 400 millones de dólares.
Las ventas totales ascendieron a 991 millones de dólares, mientras que la producción minera alcanzó un valor de 1.068 millones de dólares.
El sector minero creció gracias a la bonanza de precios altos en 64 por ciento, y su contribución al Producto Interno Bruto (PIB) que se expandió en 6,5 por ciento fue del 2,6 por ciento.
Entre otros minerales, el estaño descendió en su cotización de 10,4 dólares la libra fina en julio a siete dólares en octubre. Las divisas provenientes de su venta al exterior alcanzaron los 114 millones de dólares.
El precio de la plata disminuyó de 17,8 dólares a 11,7 dólares la onza troy en el mismo periodo, y el del plomo cayó de 1,69 dólares la libra fina hace un año a 0,72 dólares, y son los rubros que más se vendieron después del zinc y el estaño.
El ministro de Minería, Carlos Echazú, informó ayer que esa cartera de Estado elabora un plan para afrontar la caída de los precios que será puesto a consideración del presidente Evo Morales en los próximos días.
Adelantó que la estrategia pone especial énfasis en el zinc, que es el mineral que más empleo genera en el país, aunque no precisó detalles.
Este mineral se cotizó ayer en 0,59 dólares la libra fina, ratificando la tendencia de descenso porque a principios de mes se valorizaba en 0,74 dólares.
Fuentes del sector confirmaron que el plan consiste en la compra estatal de la producción de las cooperativas y de los mineros chicos a un precio razonable que aún esta por definirse.
Esto con el dinero de un fondo que será puesto en vigencia para superar la contingencia.
La producción será estocada o almacenada y comercializada por la Corporación Minera de Bolivia (Comibol) una vez que se recuperen los precios internacionales de la materia prima.
El Gobierno aún evalúa cuánto puede durar la caída, los recursos que se canalizarán al fondo y los almacenes donde se resguardará el mineral, que debe considerar todos los cuidados medioambientales del caso. Esto para evitar que el mineral se humedezca, se filtre por el subsuelo o se esparza con el viento y que cuente con todas las medidas de seguridad a fin de evitar robos.
Echazú negó una eventual subvención y aseguró que la propuesta que tiene en análisis garantiza la producción y el empleo.
“Esperamos que la caída de ingresos no sea prolongada, nuestra propuesta es una medida no coyuntural, sino sostenida en el tiempo, que contribuya a mantener la producción sobre todo de productores chicos y de los cooperativistas”.
El presidente de la Cámara Nacional de Minería (Canalmin), Ramiro Aguilar, opinó que la reacción del Gobierno es tardía porque el sector ya comenzó a sentir los efectos de la caída de precios, por lo que varias empresas están por cerrar operaciones y despedir a sus empleados.
En Potosí, los ingenios alistan cartas de preaviso y las repercusiones de la crisis se manifiestan en la disminución de los precios de los bienes inmuebles.
Aguilar demandó la pronta vigencia del Fondo de Desarrollo Minero (Fodemin) que cuenta con un millón de dólares para que ser canalizado a los productores. Este fondo fue comprometido por el Poder Ejecutivo pero hasta la fecha no funciona, pese a que puede apoyar al sector en esta coyuntura de bajos precios.
Canalmin teme por el cese de operaciones del sector, ya que cada uno de los empresarios chicos tiene la posibilidad de generar empleo para otros diez.
La Federación de Cooperativas Mineras (Fencomin) se declaró en emergencia por el descenso de las materias primas, mientras que sus afiliados en Potosí anuncian medidas de presión.
El Presidente de la Federación Departamental de Cooperativas Mineras (Fedecomin) informó que hoy se llevará a cabo un ampliado nacional en el que se decidirán las acciones. En el Cerró Rico hace poco trabajaban 19.000 mineros, pero ahora se desconoce cuántos quedan.
El asesor de Fencomin, Ramiro Paredes, considera que la compra de la producción por parte del Estado puede ayudar al sector.
No se evaluó bien el impacto
El asesor de la Federación de Cooperativas Mineras de Bolivia (Fencomin), Ramiro Paredes, admitió que la caída de precios de los minerales en el mercado internacional “encontró” a todos los sectores desprevenidos porque no se pensó que el efecto sería tan inmediato.
Opinó que “no hubo el olfato necesario” para evaluar mejor la tendencia, pues a diferencia del zinc, que es el mineral que más disminuyó su precio, hasta el primer semestre del año el resto tenía una mejora.
Paredes afirmó que el país debió prepararse a través de un mayor fomento del Estado a la exploración de nuevos yacimientos, pues los que existen en la actualidad se encuentran agotados. De esa forma se podía haber compensado la crisis con una mayor producción.
Otra medida que no se logró implementar fue un Fondo de Estabilización con el aporte de todos los sectores en época de precios altos para afrontar periodos de “vacas flacas”.
Exploración
El ex ministro de Minería Jorge Espinoza opinó que para enfrentar la crisis, la Corporación Minera de Bolivia (Comibol) debe encarar un agresivo programa de exploración y aumentar la producción.
Según la ex autoridad, la estatal minera cuenta con al menos 100 millones de dólares disponibles de los ingresos que obtiene de sus contratos de riesgo compartido y arrendamiento de las minas de Colquiri, Bolívar y la explotación de Huanuni que está bajo su administración.
Otra medida que se puede implementar —dijo— es la revisión de la carga tributaria que es muy alta, pues actualmente el Impuesto Complementario a la Minería (ICM) ya no es acreditable al Impuesto a las Utilidades de las Empresas.
También se debe levantar la reserva fiscal de territorio porque la medida paralizó las concesiones en trámite.
Evolución de cotizaciones ( en dólares)
Mineral octubre 2006 octubre 2007 julio 2008 octubre 2008
Zinc (libra fina) 1,53 1,32 0,81 0,66
Estaño 4,15 7,16 10,4 7
Plata 11 13,2 17,8 11,7
Plomo 0,66 1,69 0,74 0,72
Cobre (libra fina) 3,291 3,619 3,871 2,496
Oro (onza troy) 572,4 732,8 921,9 906,5
Las exportaciones de minerales en el primer semestre del año alcanzaron a 991 millones de dólares.
Los principales mercados fueron Asia con 550,68 millones, luego Europa con 227,79 millones y América con 212,46 millones. Fuente: Informe Estadístico del Ministerio de Minería.
LOS DATOS
La caída de precios se extendió a partir de la crisis financiera en los EEUU.
Bolivia ya siente los efectos, pero se anticipa que en 2009 habrá mayores repercuciones.
La minería en los recientes tres años se beneficio de las altas cotizaciones.
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