La protección a la industria nacional está vigente y debe ser respetada, más todavía si se trata de producción local y que guarda relación con la minería, dijo ayer el presidente de la Federación de Empresarios Privados de Oruro (FEPO), Fernando Dehne Franco, al reclamar por la actitud que asumen en algunas empresas del Estado.
Mencionó que conoce casos que involucran a ejecutivos de empresas del sector estatal que realizan la adquisición de insumos sin respetan la norma vigente que establece que la industria nacional goza de protección frente a la extranjera y con mayor exigencia si se trata de una factoría que desde hace muchos años provee insumos para la explotación minera, por lo que no se puede permitir adquisiciones ilegales para favorecer a proveedores de empresas de países vecinos.
Calificó como un "dumpin" la actitud que asumen para la provisión de estos insumos puesto que pese a haberse solicitado una rebaja en el precio del producto, por la reducción en la cotización del metal en el mercado internacional, se prefiere adquirir productos no certificados de procedencia extranjera y con un precio casi similar pero de inferior calidad.
El presidente de los empresarios afirmó que se realizará la representación oficial ante las autoridades competentes del ramo de minería, porque no se puede poner en riesgo la estabilidad de industrias locales que dejarán de proveer productos a la minería, por decisión de una comisión que desconoce la vigencia de la norma de protección a la industria boliviana.
Aseguró que sólo se puede importar y adquirir productos de otros países, cuando no existe de producción nacional, porque está vigente la preferencia y la protección para la industria boliviana, puesto que se crea un valor agregado con la generación de empleos, el pago de tributos y además la reinversión de las utilidades en función de las necesidades que hay en la región, donde se busca fortalecer a la industria local.
Comentó Dehne que existen muchos "proveedores" ocasionales que asoman para hacer algunos negocios y que luego desaparecen, situación que se da en varias empresas del sector estatal, donde se realizan compras sin garantía y después se lamenta por la pésima calidad que a la larga genera perjuicios y daños económicos a las empresas.
La producción nacional es de alta calidad y está certificada mientras que la traí-da de países vecinos que se oferta, al parecer con "menor precio", no es garantizada y eso supone poner en riesgo incluso las operaciones que realizan en las empresas que adquieren esos productos de dudosa calidad, reiteró el presidente de la FEPO.
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