Ya el mes de agosto pasado se realizó una evaluación del rendimiento de la actividad minera en nuestro país, especialmente en el primer semestre de la gestión estableciéndose entonces que el país dejó de percibir más de 230 millones de dólares por un descenso de casi el 20 % en la producción de minerales con relación al índice productivo de la gestión pasada (2011). La exportación de metálicos también marcó una bajada cercana al 30 % con relación a la gestión pasada lo que significó una merma mayor a 136 millones de dólares.
La información de agosto pasado, que la oficializó el viceministro de desarrollo productivo minero, muestra un panorama desolador ya que por efecto de la baja de precios en el mercado internacional y de mantenerse tal comportamiento, al final de la gestión la suma por la disminución de ingresos podría ser de alrededor de 350 millones de dólares.
Cuando se conocen las cifras sobre las recaudaciones mineras y como en el caso presente con un registro en pérdida, naturalmente ese fenómeno coyuntural marca la preocupación de los sectores productivos, llámense grandes, medianos o chicos, privados y estatales, además del cooperativo, aunque este último siente menos el impacto al incumplir algunas obligaciones de orden tributario y social, lo que disminuye ostensiblemente su carga de pagos ineludibles.
Según datos del Instituto Nacional de Estadística, INE, en los seis primeros meses del año en curso la exportación de nuestros minerales a los mercados internacionales facturó 962 millones de dólares, mientras que un año atrás y en el mismo periodo la venta llegó a 1.194 millones de dólares. En lo que corresponde a la venta de metálicos, el primer semestre de este año registró 328,29 millones de dólares en tanto que el año pasado la suma fue de 465.22 millones lo que muestra un desfase en los ingresos que podría acrecentarse si no se produce una reversión de valores en las pizarras internacionales. Hay que señalar que las exportaciones del sector minero representan hasta el 25 % del total de las ventas nacionales en los primeros seis meses del año presente.
Hay más datos
Otro dato importante pero que corresponde al análisis económico de la Fundación Milenio y que se publicó el pasado mes de octubre, ratifica el proceso de bajada en el primer semestre del año presente en la producción de minerales, representando ese hecho un porcentaje del 5,6 % en comparación a similar periodo del año pasado, aunque en este informe un motivo de características especiales atribuye la fluctuación negativa a la baja en los precios de minerales y se complica la instancia con la toma de minas que ahuyenta las inversiones, haciendo más difícil el desarrollo regular de las actividades mineras.
El análisis de la Fundación Milenio señala que la menor producción en sectores como la minería chica y la cooperativizada se debe principalmente a la disminución en los precios internacionales, mientras que el mismo fenómeno en el caso de la minería grande o mediana se debería a problemas técnicos y a la calidad de yacimientos…sin embargo datos de las mismas empresas atribuyen una disminución de su producción a los problemas de inseguridad jurídica, el caso de los avasallamientos y por añadidura la rebaja internacional de precios.
Aunque no se menciona al sector minero estatal el efecto en los índices de la producción tiene sus contingencias, se registra una baja productiva y un menor rubro de ingresos, pues el problema de los precios externos no hace diferencia entre mineros privados o estatales.
Al tercer trimestre
Si las cifras son elocuentes en los registros de los primeros seis meses en lo que corresponde a la producción minera y el descenso en cantidad y en precio colocando a la minería en una difícil situación, el registro del mismo INE, pero en torno a los tres semestres del año (9 meses), no deja de ser preocupante pues se afirma que las exportaciones mineras se desplomaron en un 20 por ciento, considerando que en la gestión pasada en tres trimestres la caída fue de 1.886 a 1.507 millones de dólares.
Un hecho especial hace referencia a la caída en el precio del estaño metálico, algo que regularmente no sucede pero que en la ocasión presente según el INE bajó hasta en 32 por ciento, eso significa que nuestros lingotes de alta pureza tuvieron un bajón en su precio de exportación, otro tanto sucedió con la plata metálica, aunque en menor proporción pues su descenso fue de 29 %.
El fenómeno de los precios internacionales de los minerales y su relación directa con la producción nacional deja una serie de inquietudes, de manera especial entre los productores privados, los grandes, medianos y chicos, ya que al no haber una política minera definida no existe seguridad para mejorar las inversiones y hacer frente a la coyuntura del vaivén de cotizaciones que pone en riesgo los proyectos en curso de ejecución y puede alterar los nuevos emprendimientos que se perfilan para encarar los mega proyectos mineros.
Según el análisis coincidente sobre cifras y situación actual de la minería, hay que tomar en cuenta la carencia de normas claras para garantizar el desarrollo de los emprendimientos mineros, sean estos los que propugna el propio Estado como el Mutún o el Litio o los que han sido nacionalizados, como Colquiri o Mallku Khota, pero de manera general el resto de la minería y en ese rubro la mediana y la chica que exigen garantías para encarar sus emprendimientos bajo atractivas reglas de juego, incentivos financieros y tributarios, pero ante todo seguridad jurídica para invertir y trabajar sin sobresaltos. (Agencia Uru).
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