El ministro de Minería de Bolivia, César Navarro, confirmó que hace tres semanas se firmó el contrato para la comercialización de lingotes de estaño a la firma alemana Thyssenkrupp.
La compañía siderúrgica alemana Thyssenkrupp comprará el 25% de la producción de estaño metálico a la metalúrgica boliviana Vinto por un periodo de dos años, con la opción de ampliar el tiempo de adquisición del producto.
Así lo confirmó el ministro de Minería de Bolivia, César Navarro, quien detalló que hace tres semanas se firmó el contrato para la comercialización de lingotes de estaño. "Es una compañía alemana muy importante, quería comprar (el mineral) por diez años, pero nosotros aceptamos solo dos años porque consideramos que habrá una variación del precio del estaño", afirmó al diario La Razón.
La semana pasada el Ministerio de Minería y Metalurgia boliviano publicó una información que señalaba que con la puesta en marcha del horno Ausmelt se tiene la perspectiva de que Vinto procese alrededor de 2.000 toneladas métricas de estaño metálico hasta fin de año y 14.000 toneladas métricas finas (TMF) en 2016; su capacidad máxima llegará hasta 18.000 TMF de manera gradual.
En enero de este año la compañía alemana había mostrado su interés por comprar lo producido por la metalúrgica estatal Vinto, mediante un contrato que iba desde cinco hasta diez años. En febrero se firmaron las cartas de entendimiento entre ambas empresas para que el Gobierno venda las 3.000 toneladas métricas finas (TMF) de estaño adicionales que producirá Vinto este año con las operaciones del horno Ausmelt.
Se destaca que la calidad de los lingotes metálicos de estaño producidos en la Metalúrgica de Vinto en Oruro, son altamente requeridos por su calidad y pureza de más del 99 %, por lo mismo que este material es muy cotizado en el ámbito internacional, de ahí el interés de la compañía siderúrgica alemana para comprar un cuarto de la producción de Vinto por un largo periodo, lo que no funcionará en función de tiempo puesto que el contrato inicial es de sólo dos años.
A la firma del contrato, los compradores como los vendedores, tenían plena confianza en el incremento de la producción de Vinto con el nuevo horno Ausmelt.
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