El embajador francés en Bolivia, Antoine Grassin, ratificó que su país mantiene interés en explotar y comercializar el litio boliviano, pese a las nacionalizaciones realizadas por el Gobierno en los últimos días.
Grassin señaló que intentará lograr la asociación de Bolivia con empresarios franceses en la explotación del litio existente en el Salar de Uyuni (Potosí), útil en la fabricación de baterías para coches eléctricos.
Si entramos en el tema del litio, lo vamos a hacer según un esquema jurídico financiero totalmente consensuado con el Gobierno, no hay otra manera, por supuesto, declaró.
Con respecto a las empresas eléctricas con capital francés nacionalizadas el pasado fin de semana, el diplomático apuntó que espera un trato económico favorable a ambas partes en los próximos seis meses.
El presidente Evo Morales, nacionalizó el sábado pasado, entre otras, la generadora eléctrica Corani, ubicada en Cochabamba (centro), cuyo 50 por ciento de las acciones estaba en poder de una firma francesa con capital estatal.
Las autoridades del MAS han reiterado en el transcurso de la semana que todos los accionistas recibirán una indemnización justa, de acuerdo con los estados financieros de cada empresa.
Sin embargo, en cuanto al litio Argentina le lleva gran ventaja a Bolivia. Al menos una docena de empresas transnacionales trabaja sobre los salares del norte de ese país para determinar la factibilidad de extracción de litio. Es un negocio promisorio: en 2008 sólo uno de sus derivados, el carbonato, movió 590 millones de dólares.
Las reservas mundiales de este mineral se estiman en once millones de toneladas métricas (tnm) y cotizan a siete mil dólares la tonelada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario