Bolivia recibió, hasta el momento, siete propuestas parciales para la exploración, explotación e industrialización del litio. En ninguno de los casos son concretas o específicas respecto del financiamiento. El Gobierno las rechaza porque no incluyen montos de inversión para la industrialización y porque pretenden el control del proyecto por encima del Estado.
Las dos propuestas más serias son: la del consorcio francés Bolloré-Eramet y la del bloque japonés, compuesto por tres empresas: Mitsubishi Corporation, Sumitomo Corporation y la estatal Japan Oil Gas and Metals National Jogmec. Ambas, a las que tuvo acceso La Prensa, presentaron sus propuestas por escrito y con cronogramas (las otras son sólo verbales), sin embargo solamente la francesa establece montos y propone invertir 15 millones de dólares para el proyecto piloto.
El salar de Uyuni, ubicado al sudoeste del país, tiene más de 10.000 kilómetros cuadrados y, según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS, del inglés o United States Geological Survey), posee una reserva de alrededor de entre 8,5 y nueve millones de toneladas de litio metálico, una de las mayores en el mundo.
El Gobierno trabaja actualmente en la planta piloto para obtener carbonato de litio. El director de la Unidad de Recursos Evaporíticos dependiente del Ministerio de Minería, Alberto Echazú, dijo: “Lo más importante es que nuestro proyecto avanza, no es que estamos esperando a lo que digan las empresas y entretanto no hacer nada”. El plan es producir carbonato de litio en 2013, para luego avanzar hacia la industrialización con la producción de baterías de litio. Para esta segunda fase del proyecto, el Gobierno aún busca financiamiento.
En ninguno de las propuestas más serias presentadas ante el Gobierno se especifica si aportarán con recursos para la fase de la industrialización. Esta información fue corroborada por Echazú, quien dijo a este medio que “ambos planes hablaron de financiar la planta piloto, pero nunca nos concretaron el financiamiento (para la industrialización)”.
Lo que al Gobierno boliviano le interesa es que las empresas inviertan en productos con mayor valor agregado y no sólo se explote la materia prima. También quiere ser socia mayoritaria del emprendimiento, hecho que no convence a algunos interesados como Francia.
Las propuestas del Gobierno de Brasil y de la empresa brasileña Vale do Río Doce, la coreana Kores y la de Irán son propuestas verbales y parciales. La empresa china Citic también manifestó su deseo de ser parte del negocio del Litio, pero no manifestó propuestas específicas; sus representantes llegarán a fin de mes para reunirse con autoridades del Ejecutivo.
A éstos se suman las empresas finlandesas que estuvieron en el país la semana que concluye, con quienes se llegaron a algunos acuerdos preliminares. Según Echazú, “son acuerdos preliminares con Finlandia. Con ellos (European Batteries) hemos hablado para avanzar en la instalación de un laboratorio para electroquímica y baterías, y vamos a trabajar paso a paso”. Mientras con la empresa Autotech “estamos trabajando en algunos programas de ingeniería de diseño y en la provisión de equipos”.
El director de Desarrollo de Negocios de European Batteries, Olli Nuutinen, aseguró que quieren “poner la planta de manufactura para las baterías acá en Bolivia”.
Echazú adelantó que a mediados de agosto iniciará operaciones la planta piloto. “Estamos a punto de culminar la construcción de las piscinas y los diques, hemos licitado las geomembranas y geotextiles para pasar al bombeo”.
Bolloré quiere financiar planta de baterías bajo su control
El embajador de Francia en Bolivia, Antoine Grassin, en entrevista con La Prensa dijo que Bolloré está dispuesta a financiar una planta de baterías de litio, pero bajo su control. Lo que no está acorde con las reglas del Gobierno, ya que es el Estado quien debe tener la mayoría de las acciones.
—¿Después del anterior encuentro con el Gobierno, hubo más contactos?
—No hubo muchas novedades desde fines de abril pasado, cuando vinieron (Bolloré-Eramet) el 28 de abril para tomar contacto, así que todavía estamos esperando otra señal del Gobierno boliviano.
—¿Sólo les interesa el litio para la explotación o también otros minerales?
—Es cierto que cuando se producen las salmueras, el producto que viene en volúmenes más importantes y de manera bastante fácil es el potasio, y si el potasio tiene un uso industrial bastante importante, podemos proponer algo, no sería directamente la empresa francesa (sino recurrir a otras). Los demás productos como el magnesio y otros minerales en cantidades menores, esto no se considera en la propuesta.
—¿Cuál es su propuesta en el tema del financiamiento?
—Es cierto que el litio del Salar de Uyuni es una reserva fiscal, y por lo tanto deber ser de dominio boliviano, entendemos que las autoridades bolivianas, Comibol especialmente, quiere tener el control, lo que significa para nosotros brindar un asesoramiento tecnológico, podemos también participar en el financiamiento, pero esto corresponde al grado de cofinanciación, lo tienen que determinar los bolivianos porque es una función del nivel de control.
Una vez que está producido el carbonato (de litio), se habla de recursos que no tienen el mismo carácter estratégico y se puede considerar una cofinanciación. En cuanto a la fase industrial de producción, por ejemplo de baterías, la propuesta nuestra es que sea bajo el control de Bolloré con una financiación de la empresa.
—¿No existe un financiamiento?
—No, no hemos llegado al punto que nos permite determinar el financiamiento que se requiere, la empresa está dispuesta a invertir lo que hay que invertir, eso sí, pero no se puede hacer sin el acuerdo del Gobierno boliviano, y para esto necesitamos discutir más y no hemos llegado a este punto. Lo que esperamos es si nos dicen sí o no. Pero lo que sí es cierto, si se trata de hacer una planta de batería, Bolloré ya lo ha hecho en otros países.
Empresas y países interesados en el litio de Bolivia
Bolloré propone llegar hasta el litio metálico
El consorcio francés Bolloré-Eramet presentó la misma propuesta en dos oportunidades, la primera en marzo de 2009 y segunda en abril de 2010. El proyecto contempla cinco fases.
Las dos primeras fases están referidas al proyecto piloto, que el Gobierno actualmente ejecuta. La primera es para la exploración, con pruebas de ingeniería. Proponen que se haga en dos años, para lo que aportarán cinco millones de dólares, y la creación de 30 empleos directos y varios indirectos.
La segunda fase es el desarrollo del proyecto piloto, también en dos años, y se invertirán 10 millones de dólares y se crearán de 30 a 40 empleos directos.
A la conclusión de dichas fases sólo se pasará a la explotación industrial y construcción de la planta si existe un contrato de explotación aprobado por la Asamblea Legislativa Plurinacional. Después se ingresa a la tercera etapa, que es de producción, para lo que se puede necesitar de unos 200 millones de dólares y tener una producción de 30.000 toneladas de carbonato de litio por año. Este trabajo al parecer se desarrollará en tres años. Sin embargo, la propuesta no establece de dónde salen los recursos o si hay alguna contraparte.
En la cuarta fase se establece la producción del cloruro de litio, sulfato de potasio y ácido bórico, y en la quinta se plantea la obtención del litio metálico.
Japoneses plantean tres fases sin financiamiento
El bloque japonés Mitsubishi Corporation, Sumitomo Corporation y la estatal Japan Oil Gas and Metals National Corporation (Jognec) presentaron su propuesta en 2008 y comprende tres fases, pero en ninguna se establece financiamiento.
La primera fase está dedicada a la construcción de la planta piloto, que tomará dos años. La segunda, a la operación de la planta piloto, diseño y estudio de factibilidad de la planta industrial, que será en tres años y medio, y la tercera fase se refiere a la construcción de la planta industrial, que se efectuará en un año y medio.
En las dos últimas fases sólo se plantea que habrá “apoyo del Gobierno del Japón a través de sus regímenes de financiamiento, garantías y seguros”.
No obstante, el director de la Unidad de Recursos Evaporíticos, Alberto Echazú, explicó que el bloque, al igual de los franceses, plantean un financiamiento de 10 a 15 millones de dólares sólo para el proyecto inicial que es el piloto.
Según la autoridad, “ellos sólo han puesto mucho interés en la producción de la materia prima, pero a nosotros nos interesa todo, y sobre todo la industrialización, y en eso no ha habido una precisión. Hablan de toda la cadena, pero haciendo hincapié en lo primero (fase piloto), pero eso es lo que estamos haciendo nosotros”.
Finlandia, pacto preliminar
Con Finlandia se llegaron a acuerdos preliminares para avanzar en la instalación de un laboratorio para electroquímica, al igual que trabajar en algunos programas de ingeniería de diseño y en la provisión de equipos para la planta piloto. En caso de que esto dé buenos resultados, se analizará la provisión de equipos para la planta industrial.
La empresa Autotech será la encargada de dotar equipos, mientras que en la European Batteries, experta en la fabricación de ión de litio, manifestaron su intención de construir una planta de baterías en Bolivia, que puede tomar dos años, empezar en 2012 y terminar en 2014. El director de Desarrollo de Negocios de European Batteries, Olli Nuutinen, aseguró que darán los recursos, pero que la accionista mayoritaria será Bolivia. Ambas empresas serán parte del Comité Científico del Litio y próximamente junto con el Ejecutivo conformará otros grupos especializados en electroquímica y baterías.
Brasil, propuesta verbal
En el caso del Brasil, si bien existe una carta de entendimiento con Bolivia, no hay nada establecido. Sin embargo, la empresa del vecino país Vale do Río Doce propuso de manera verbal realizar la explotación y la producción de materia prima.
Vale pone énfasis en explotar el cloruro de potasio como materia prima y resta importancia al litio, aunque para el país éste último es estratégico. Además, al Gobierno de Evo Morales no le interesa sólo la explotación de materia prima, sino de materia con valor agregado. Brasil es un importante mercado para el potasio, ya que este mineral permite hacer el abono sintético industrial.
El memorándum de entendimiento para la industrialización del litio y de los recursos evaporíticos del Salar de Uyuni fue firmado por los presidentes Evo Morales y Luis Inácio Lula da Silva el 22 de agosto de 2009. Brasil acordó cooperar con capacitación científica.
Corea del Sur e Irán
Los coreanos del sur también están interesados en ser parte del negocio del litio boliviano, por lo que se llevaron muestras de salmueras del Salar de Uyuni para estudiarlas. La representación de ese país llegará a Bolivia en agosto para dar a conocer los resultados que obtuvieron de ese trabajo.
La compañía estatal Kores fue incluida en la Comisión de Investigación sobre el Litio, decisión contemplada en una carta de intenciones firmada entre representantes de Bolivia y de la empresa coreana, en agosto del pasado año.
Irán también firmó un memorándum de entendimiento con Bolivia en noviembre de 2009. El objetivo es el fortalecimiento de la cooperación para programas de industrialización de los recursos evaporíticos del Salar de Uyuni. Irán está dispuesta a dar financiamiento, no obstante, el tema debe ser tratado en una reunión de alto nivel, ya sea entre cancilleres o entre presidentes de ambas naciones.
Los chinos visitan el país
La empresa de China Citic Guoap Group también es otra interesada en la exploración y explotación del litio, por lo que se llevaron salmueras para realizar estudios.
La información la dio a conocer el director de la Unidad de Recursos Evaporíticos, Alberto Echazú, quien dijo que “con Citic tenemos el anuncio de que llegan este fin de mes. Ellos se han llevado salmuera porque están interesados en el proyecto. Los chinos, a diferencia de las empresas finlandesas, que trabajan con la tecnología de punta en productos de nueva tecnología, desarrollan actividades en las salmueras y en toda la cadena”. Indicó que Citic trabaja toda la cadena productiva ya que tiene su propio salar, “que es un salar como el nuestro, con contenidos muy elevados de magnesio. Ellos ya han producido carbonato (de litio), han producido sales, producen incluso baterías, toda la cadena, y ellos están llegando a fin de este mes, pero vamos a ver qué podemos adelantar”.