domingo, 24 de abril de 2016

Racionalidad salarial en propuesta de la Fstmb

Frente a la situación que confronta especialmente el sector de la minería estatal en nuestro país, soportando ya un prolongado bajón en los precios internacionales de los minerales que exportamos, no resulta prudente insistir en aumentos de salarios que estén fuera de las posibilidades reales de las empresas, según los dirigentes de la Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia (Fstmb).

Para el sector un hecho importante es precautelar las fuentes de empleo, puesto que ya es sabido que la manera más fácil de nivelar los gastos salariales, generalmente se hace despidiendo a cierto número de trabajadores, incluso en situaciones extremas, cerrando las operaciones de algunas empresas.

La situación actual, si bien no es generalizada en toda la minería y la metalurgia dependiente del Estado, hay algunos centros mineros que han logrado nivelar sus costos de operación y salen adelante, generando cierto nivel de utilidades, es el caso de mina Colquiri, y en el rubro metalúrgico la Fundición de Vinto.

En tanto, el caso de Huanuni es crítico pese a los soportes que se han dispuesto para evitar el colapso de esa empresa, empero, resulta difícil compensar los costos de operación, cuando su obligación social, es el caso de la abultada planilla laboral que tiene, consume la mayor parte de sus ingresos. Algo parecido sucede con Karachipampa, que también debe pagar salarios aún sin producir regularmente y añadir los costos de reparación de sus obsoletos equipos, hechos que colocan en desventaja a esos sectores que funcionan bajo el control de la Corporación Minera de Bolivia (Comibol), el ente estatal minero que por su lado también gasta más de lo que percibe y tarda demasiado en el proceso de su reestructuración para convertirse en factor de impulso productivo de la minería y metalurgia del país.

CUESTIÓN DE SALARIOS

En el tiempo actual el tema de los salarios a nivel general, está ocupando la atención de los sectores interesados en lograr una elevación del nivel vigente hasta el presente. El Gobierno ha hecho conocer su propuesta que no va más allá del 4 por ciento, mientras que el organismo laboral la ha rechazado e insiste en que tal incremento sea mayor al 8 por ciento.

Los mineros asalariados hacen hincapié en el hecho de tomar como parámetro el planteamiento final que tenga la COB, pero en todo caso analizando "fríamente" la situación de cada empresa, para no incidir en obligaciones salariales que no puedan cumplirse y ocasionen un efecto negativo en las relaciones obrero - patronales.

Uno de los ejecutivos de la Fstmb, fue claro al señalar que se rechaza el 4% de incremento propuesto por el Gobierno, se insistirá en un mayor incremento pero tomando en cuenta las posibilidades de cada empresa, para no poner en riesgo la estabilidad laboral y las fuentes de empleo. En el caso concreto de Huanuni, aunque sin especificarlo, se entiende que los propios trabajadores flexibilizarán su planteamiento salarialista.

PRODUCCIÓN REAL EN LA EMH

Tomando en cuenta datos de la Comibol, aunque corresponden a la gestión 2014 y que se refieren al rendimiento de la EMH, se establece que en la gestión 2014 se generó una producción de 6.950,03 toneladas métricas finas (TMF), habiendo los mineros de interior mina y relaves producido la cantidad de 4.452 TMF que significa un porcentaje de 64% del total producido, y que corresponde al sector "selectivo" con 2.861.40 TMF: guía mina con 1.369.460 TMF y relaves con 221,26 TMF, en cambio los ingenios mecanizados de Santa Elena (2.209,40 TMF) y Machacamarca (283,85 TMF) alcanzaron una producción total de 2.497 TMF, que significa el 36% logrado en ingenios.

Lo que significa que el sector de trabajadores mineros estaría cumpliendo su rendimiento de producción, aunque surge una incógnita y es que no se puede explicar la causa de la debacle en Huanuni. Lo que estaría faltando es una adecuada explicación sobre el movimiento administrativo de la importante mina de la Comibol, las causas concretas de esa baja productividad, los sitios de operación con debilidades técnicas y la urgencia de implementar mejor los sitios que todavía son aptos para la extracción de concentrados.

Utilizamos los datos de la gestión 2014, porque son los únicos que han sido difundidos oficialmente, quedando pendiente la información estadística de producción, venta de minerales y regalías de los distritos productores, que corresponden a la gestión 2015.

LAS NEGOCIACIONES

Está visto que el tema salarios demandará de sus actores largas jornadas de negociación, considerando los dos extremos propuestos entre el 4 y el 8,5 por ciento respectivamente, desde el gobierno y el planteamiento de la COB.

El tema se trata de manera parcial, sólo con representantes de dos sectores, el oficial y el sindical, empero por las condiciones que existen actualmente en el sector minero, se ha planteado que se analice la situación de las empresas que tienen problemas de sostenimiento económico y eso significa que un tercer frente de negociación debe participar en la búsqueda de acuerdos satisfactorios, sin tomar en cuenta, el caso de la "pequeña minería" del sector privado que confronta serios problemas para mantener sus operaciones, además del sector de las cooperativas, organizaciones en las que también hay asalariados, por lo menos en algunas de estas, donde deben cumplirse compromisos sociales. Delegados de todos estos frentes productivos deberían ser parte de las negociaciones.

El panorama es poco alentador en materia económica. La estructura administrativa de las empresas del Estado y para el caso presente, las mineras no dejan mucho margen para una visión salarial excesiva, por lo mismo la posición cautelosa y racional de la Fstmb puede tener un efecto positivo de negociación y servir de ejemplo para negociar aumentos salariales en función a posibilidades reales, que no expongan la seguridad laboral de los trabajadores.

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