No es posible minimizar o peor ignorar la crítica situación por la que está atravesando la minería nacional en un periodo cíclico en el que la presión de países industrializados, especialmente asiáticos y la China para precisar la causa del problema, han generado el descenso del precio.
De acuerdo a la información del Servicio Nacional de Registro y Control de la Comercialización de Minerales y Metales (Senarecom), en el primer trimestre de este año, el país exportó minerales por un valor de Bs. 4.952,9 millones, mientras que en el 2014 en el mismo periodo la venta fue de 6.973,3 millones de bolivianos, apreciándose la disminución de Bs. 2.020,4 millones.
Lo que dice además el Senarecom, es que en el primer trimestre del año exportamos 27 tipos de minerales y metales a varios destinos, entre esos uno de los mayores compradores de estaño fue Estados Unidos que sumó casi el 60 por ciento del total exportado de ese mineral que también, junto a otros vendimos a China, Alemania, Holanda, Chile, Inglaterra, Colombia, Malasia, México y otros.
El valor recuperado por la venta de nuestros minerales y metales a esos países reportó un ingreso para nuestro país de Bs. 526,6 millones aunque un año antes en los primeros tres meses recuperamos Bs. 629,1 millones, los datos muestran también una baja de 102,5 millones, según el Senarecom.
Otro dato importante tiene que ver con los volúmenes de exportación de minerales, también en el registro del primer trimestre lo que marca un total de 187 mil toneladas. Mientras que el mismo periodo del año 2014, ese volumen exportable fue de 179 mil toneladas. En este caso se aprecia algo importante, es que pese a la crisis de precios y los problemas que genera ese hecho, se incrementó la cantidad de exportación en 7,6 mil toneladas, lo que significa porcentualmente una subida de 4,2 por ciento. Los minerales de mayor movimiento fueron el boro y el plomo, no así los tradicionales como la plata, estaño o zinc. Por lo que se observa, es posible encarar planes especiales para impulsar la mayor producción de otros minerales que son muy requeridos en los mercados externos. En lo que corresponde específicamente al estaño, el Senarecom informó que la cantidad exportada en los tres primeros meses fue de 4,04 mil toneladas, el año 2014 fueron sólo 4 mil toneladas exportadas en tres meses.
LAS REGALÍAS
Ahora bien, si las exportaciones bajaron de promedio, la consecuencia lógica es que también bajen las regalías un factor que incidirá negativamente en los presupuestos de las gobernaciones y los municipios en los que se producen operaciones mineras, pero de manera general, este recorte obligado del impuesto obligado de regalías tendrá incidencia generalizada en la economía nacional.
De acuerdo a la norma vigente del 85 por ciento que llega a los departamentos productores por concepto de regalías, el 10 % debe destinarse como presupuesto para tareas específicas de prospección y exploración minera, cuenta que registrará una rebaja proporcional a la disminución de regalías, en tanto persista el periodo de los precios bajos.
En materia de cifras, tomando en cuenta el primer trimestre del año presente que es el periodo en que se siente el efecto de la reducción de ingresos, las regalías disminuyeron en un 26,5 por ciento, tomando en cuenta que las regalías recuperadas el año pasado fueron de Bs. 288.16 millones y las del reciente trimestre sólo sumaron 211,57 millones, lo que significó una resta de Bs. 76,5 millones.
Sobre este tema el exministro de Minería y analista, Dionisio Garzón, señala que "como no habrá nuevas exploraciones, de aquí a cinco años no habrá minerales para explotar, ya que ni la empresa privada ni el Estado están avanzando en esa labor".
Es un hecho inobjetable que ha sido observado anteriormente, motivó algunas reflexiones interesantes entre expertos de la minería, planteando al Gobierno la necesidad de establecer condiciones apropiadas para definir una política agresiva de prospecciones y exploración de yacimientos para elegir nuevos sitios de explotación, tomando en cuenta, precisamente que para encarar grandes proyectos, se requiere mucho tiempo y bastante inversión, pues en minería, pueden tardarse varios años en definir y preparar las nuevas operaciones de extracción de minerales. Este proceso es lento y además requiere de tecnología apropiada para avanzar exitosamente en los nuevos prospectos que sean detectados y cuya rentabilidad sea asegurada. Se pone como ejemplo el caso de la minera San Cristóbal, que demoró 10 años antes de ponerse en producción efectiva.
Una sugerencia especial para el momento de crisis, señala que "deben apoyarse las opciones de producir mayormente los minerales que valen más", en este caso y coyunturalmente las acciones deberían dirigirse al oro que está reportando precio más o menos estable, aunque su producción, como el caso de La Paz, se produce entre los "barranquilleros", pues los yacimientos auríferos de alto rendimiento son escasos, uno en proceso de reducción es justamente Inti Raymi en Oruro, que estaba rebajando costos de operación, disminuyendo parte de su personal.
EL CASO HUANUNI
En el caso de las regalías mineras, el distrito que sentirá con mayor dureza la disminución de ingresos, es justamente Oruro por su dependencia directa de la producción de estaño y por las implicaciones que este hecho tendrá en el caso de Huanuni y la provisión de materia prima para la fundición de Vinto.
El problema de orden social es realmente el más preocupante para las autoridades nacionales, tomando en cuenta que el alto costo de producción se debe justamente al elevado número de trabajadores, más de 4.500, en una planilla que muestra una escala de altos salarios en un buen número de los trabajadores.
Con la intención de disminuir esa incidencia, desde los niveles superiores se dispondrá el retiro de cierto número de trabajadores en edad de jubilación, aunque para ese objetivo se espera un decreto supremo que suba la antigüedad laboral de un importante contingente de trabajadores, esperándose que hasta fin de año, ese proceso permita contar con no más de 3.500 trabajadores efectivos.
El otro tema de revisión corresponderá al análisis de la planilla y los contratos pues se comprueba que hay más de una decena de trabajadores que perciben Bs. 45.000 como sueldo mensual trabajando en interior mina, otro sector está en una escala de Bs. 6.000 a 10.000 y hasta 15.000 mensuales. De acuerdo a estimaciones preliminares, en Huanuni se requerirá de 10 millones de dólares para jubilar a por lo menos 500 trabajadores mineros.
COLQUIRI, LA
OTRA CARA
Finalmente, en el caso minero, se muestra la objetividad de operaciones en la Mina Colquiri, la otra importante empresa de la Comibol, en la que no se registra pérdidas, al contrario existen utilidades y hasta se asegura que pese a la crisis de los precios, en la presente gestión se producirá el incremento salarial que ha sido dispuesto oficialmente. Dirigentes de Colquiri aseguran que la baja de precios en minerales contrarrestará con mejor equipamiento para aumentar los volúmenes de producción.
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