“La nacionalización de Colquiri (2012-2015). Intersecciones y contradicciones entre actores mineros cooperativistas, asalariados y Estado”, es la investigación de la docente de Sociología de la Universidad San Francisco Xavier Gloria Ruiz, quien concluye que durante todo ese proceso el Gobierno mostró posiciones ambivalentes.
La también becaria del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas de Argentina (CONICET) recordó que el conflicto de Colquiri enfrentó a dos sectores: los cooperativistas y los asalariados, como ocurrió en 2006 en Huanuni. Y el Estado, también fue un actor participante pero “fragmentado” porque en su seno existen diversos intereses, están los cooperativistas y quienes apoyan la demanda de nacionalización. “Entonces sus posiciones como Gobierno fueron ambivalentes durante todo el proceso”, afirmó.
Esta situación, Ruiz la denominó “campo de disputa”, porque se trata de un espacio dinámico y conflictivo, en el que los tres actores participan, disputan, avalan y ratifican sus demandas, y es el proceso por el cual surgen las políticas públicas mineras.
“Pienso que requerimos categorías teóricas que nos permitan explicar la complejidad y el movimiento de los procesos políticos bolivianos, en especial, una situación como la Nacionalización de Colquiri. Otra categoría teórica aplicada es la de fricción, entendida como la coproducción entre el capitalismo global y lo local, en este caso, esto permite comprender el alza de los precios de los minerales, el enriquecimiento de los cooperativistas y su poderío y al mismo tiempo, las contradicciones de un Estado que debería sacar provecho de una situación económica de alza de minerales, pero que se empeña en mantener el modelo primario exportador de materias primas”, sostuvo la académica en la Biblioteca Pública Gunnar Mendoza, en el marco del ciclo de conferencias Martes de InvestigaSur.
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