Nadie cede y el conflicto minero entra al tercer día de bloqueos

Por tercer día consecutivo y tras dos jornadas de violencia que dejaron al menos un muerto y decenas de heridos, los cooperativistas mineros mantienen bloqueadas el miércoles varias carreteras principales de Bolivia.
Los cortes en las carreteras La Paz-Oruro, Oruro-Cochabamba y en proximidades de la ciudad de Potosí provocaron la suspensión de todo el transporte terrestre de pasajeros y carga entre esas ciudades, mientras centenares de camiones, buses y vehículos particulares estaban retenidos en las vías, según reportes policiales.
"Nunca se ha roto el diálogo", reiteró a primera hora del miércoles el ministro de Minería, César Navarro, en respuesta a las demandas de los cooperativistas de abrir una negociación sobre las decisiones gubernamentales que generaron el conflicto: una reforma legal que autoriza la sindicalización dentro de las cooperativas y la prohibición de contratos entre cooperativas mineras y empresas privadas.
El defensor del Pueblo, David Tezanos, anunció que continuará sus gestiones de apertura del diálogo, reconociendo sin embargo que la muerte de un manifestante caldeó los ánimos y dificultaba un acercamiento.
El Gobierno exige el levantamiento definitivo de los bloqueos como condición para el diálogo, mientras los cooperativistas plantean lo contrario, que se instale primer uno negociación para que ellos reabran las rutas.
Entretanto, seguía confirmada la muerte de un cooperativista en los bloqueos, Fermín Mamani de la mina Patacallani en la región de Sayari, y seguía sin confirmación otro deceso de un bloqueador denunciada por la Federación de Cooperativas Mineras.
Fencomin atribuyó la muerte de Mamani y la supuesta muerte del segundo manifestante a disparos de armas de fuego que habría realizado la Policía. Responsabilizó de esto al ministro de Gobierno, Carlos Romero.
El Gobierno replicó que los policías enviados a despejar los bloqueos no portaban armas letales y solicitó un informe de balística del Ministerio Público.
En esta situación, varios medios de La Paz reportaron que un nuevo contingente de policías fue enviado en la madrugada del miércoles hacia el punto de bloqueo en la región altiplánica de Panduro, de donde los uniformados se habían replegado en la noche del miércoles.