martes, 9 de agosto de 2016

Políticas (que sean coherentes) para la minería de nuestro país

Bolivia está ligada, desde siempre, a su destino minero. Es minero desde los tiempos del incario, la colonia y la mayor parte de su vida republicana hasta que otro recurso no renovable como el petróleo y sus derivados le hicieron "algo de sombra" recibiendo más atención debido al "boom" de precios de los hidrocarburos aunque éstos, como de la minería, de pronto, también bajaron, por el tobogán señalado por el mercado internacional.

La minería boliviana está en crisis, situación altamente sensible que impacta en la vida misma de los bolivianos porque, la explotación y comercialización de metales y de concentrados, sigue considerado como un sólido pilar de la economía boliviana. Puede tratarse de algo circunstancial, pero que debe convocar a la reflexión y la acción para enfrentar la crisis.

Por eso, expertos en minería claman porque sean instituidas coherentes políticas para la minería de manera que la cadena productiva de tan importante sector aterrice en la realidad del país y no aparezca errática, como ahora, y ciertamente inclinada a la circunstancial propuesta partidista.

De eso y de otros temas afines, se habló en el reciente taller sobre minería realizado aquí, organizado por la Fundación Jubileo, radio Pío XX y la red de emisoras mineras, para periodistas orureños. José Pimentel, ex ministro de Minería, y Héctor Córdova, ex presidente de la Corporación Minera de Bolivia (Comibol) y actual asesor de esta entidad fueron los disertantes que se refirieron, con énfasis y con actualizados datos, a las vicisitudes de la minería boliviana. Lo dicho en el evento, dejó amargo sabor a frustración en lo que se hace o no se hace en un rubro tan importante para Bolivia.

Historia y datos

José Pimentel, ingeniero minero formado en la UTO, en apretado recuento histórico de la minería boliviana a partir del laboreo en la mina Porco, considerada la más antigua del país, hasta nuestros días, confirmó que la explotación en los socavones es la historia misma de Bolivia, dijo que, desde luego, el proletariado minero ha sido el formidable protagonista de esa epopeya político-económica.

Para esa ex autoridad gubernamental, las políticas gubernamentales deben estar orientadas hacia la industrialización con valor agregado haciendo de Comibol una institución autónoma y autárquica, explotando y fundiendo estaño como hasta ahora, pero diversificando el renglón minero hacia el oro, la plata, etc., y otros recursos no renovables no convencionales como el litio hasta llegar, si es posible, a la producción de indio y tantalio que tienen elevado precio en el mercado internacional.

Graves Problemas

Héctor Córdova, también ingeniero de minas con sólida formación académica, fue más contundente en sus apreciaciones sobre el ámbito minero dejando entrever que, cuando fue autoridad técnica del sector, poco pudo hacer debido a la influencia político-partidista vigente en el país. ¿Comibol?. Hasta por ahí nomás" dijo. De Huanuni, la mina de estaño más grande del país, sostuvo que "está en (graves) problemas.

Hace falta racionalidad en el manejo de esta empresa". Córdova remató: "Gestión y organización son los problemas más acentuados de Comibol". Asegurando que, lamentablemente, hasta ahora no se ha logrado entender lo que es la minería, el experto señaló que, en este maremágnum, las cooperativas mineras han resultado potenciadas distorsionándose así la coherencia en el renglón minero. También se refirió al oro dejando entrever que, insólitamente, apareció vinculada al contrabando sumándose a eso la rebaja del porcentaje de regalías de 7% al 2.5% con el eufemismo de "oro marginal", o sea explotado de manera artesanal. Las cooperativas no pagan impuestos. Haber rebajado el porcentaje de regalías y que alguien no pague impuestos tiene tremendo impacto sobre el desarrollo de las regiones generalmente pobres donde se realiza la operación minera, y también sobre el erario nacional.

Sugerencias y políticas

Ante el sombrío panorama que engloba a la minería en Bolivia, donde el Estado no decide nada, dejando que el sector laboral haga lo suyo y luego presione en pos de sus propios intereses, en el taller para periodistas, se formularon estas sugerencias:

• Repensar la minería con responsabilidad y seriedad.

• Toma de buenas decisiones definiendo políticas coherentes en materia minera.

• Acelerar el proceso de fundiciones para procesar aquí todos los minerales que, actualmente, son exportadas en bruto, sin valor agregado.

• Preparación de más recursos humanos (ingenieros, técnicos, obreros calificados en minería).

Como tareas de investigación y análisis:

• Escala de regalías y de impuestos.

• La nueva Ley Minera ¿es buena y a quien favorece?.

"La minería debe ir por otro camino", textual. "Comibol debe ser productiva y dejar atrás su actual estructura que la asemeja a una empresa en liquidación".

Colofón

Ante el apretado diagnóstico sobre la situación de la minería en Bolivia formulado en el taller para periodistas se espera un "golpe de timón" desde las esferas del gobierno para enrumbarla hacia derroteros de transformación y crecimiento. Lo contrario supone llorar, sentados en una acera cualquiera, nuestra impotencia y falta de capacidad.

Que nadie olvide: Bolivia está ligada a su destino minero.

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