Cochabamba (ANF).- De persistir el avasallamiento de tierras y la usurpación de concesiones mineras, los pequeños empresarios mineros de Cochabamba prevén una escasez en la producción de yeso y cal, así como de agregados de construcción, informó ayer la Cámara de Minería.
Esos materiales que son esenciales para el sector de la construcción, al margen de su escasez, tendrá un efecto multiplicador en el sector productivo, la generación de empleo y la dinamización de la economía.
Según los propios concesionarios, las condiciones de trabajo en Cochabamba son muy difíciles, debido a que los campesinos de Tapacarí, Arque, Ayopaya, Capinota, Sipe Sipe, decidieron tomar las concesiones mineras, aduciendo que los recursos naturales es propiedad de las organizaciones campesinas.
Frente a esa situación, los industriales mineros advirtieron con dejar cesantes alrededor de 2 mil personas ligados al sector de la fabricación de yeso y cal, así como de la selección y distribución de los agregados de construcción (arena, piedra, cascajo).
Según el Presidente de la Cámara de Minería de Cochabamba, Javier Bellot, en Bolivia no hay seguridad jurídica y que las condiciones de trabajo en el sector minero están totalmente liquidado.
“Al menos 6 empresas pequeñas han decidido retirarse de la actividad y recoger su maquinaria. Muchos están buscando otros rumbos”, agregó.
De acuerdo a la versión de los microempresarios, las organizaciones campesinas están alentando la toma de minas y sitios de explotación de piedra y arena.
Esos materiales que son esenciales para el sector de la construcción, al margen de su escasez, tendrá un efecto multiplicador en el sector productivo, la generación de empleo y la dinamización de la economía.
Según los propios concesionarios, las condiciones de trabajo en Cochabamba son muy difíciles, debido a que los campesinos de Tapacarí, Arque, Ayopaya, Capinota, Sipe Sipe, decidieron tomar las concesiones mineras, aduciendo que los recursos naturales es propiedad de las organizaciones campesinas.
Frente a esa situación, los industriales mineros advirtieron con dejar cesantes alrededor de 2 mil personas ligados al sector de la fabricación de yeso y cal, así como de la selección y distribución de los agregados de construcción (arena, piedra, cascajo).
Según el Presidente de la Cámara de Minería de Cochabamba, Javier Bellot, en Bolivia no hay seguridad jurídica y que las condiciones de trabajo en el sector minero están totalmente liquidado.
“Al menos 6 empresas pequeñas han decidido retirarse de la actividad y recoger su maquinaria. Muchos están buscando otros rumbos”, agregó.
De acuerdo a la versión de los microempresarios, las organizaciones campesinas están alentando la toma de minas y sitios de explotación de piedra y arena.
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