miércoles, 9 de septiembre de 2015

Minera Vinto pagó 70% de la inversión en el Ausmelt

La Empresa Metalúrgica Vinto (EMV) ya devolvió el 70% del fideicomiso que entregó el Gobierno para construir el moderno horno Ausmelt.
El gerente general de Vinto, Ramiro Villavicencio, informó a Cambio que recibieron un fideicomiso de $us 39 millones para instalar el horno Ausmelt, de esa cantidad, la empresa ya devolvió $us 29 millones.
“De todas maneras estaríamos entrando a un proceso (de producción) con 70% de la inversión pagada y eso es una ventaja muy importante”, informó Villavicencio.
A la fecha, la estatal de fundición tiene una deuda pendiente por $us 10 millones y estima cancelar la totalidad de ese monto en dos años.
Con las operaciones comerciales del horno Ausmelt, Vinto se convertirá en la quinta fundidora de minerales más grande del mundo, señaló Villavicencio.
La puesta en marcha del nuevo horno demandará toda la producción de concentrados de estaño que se genera en el territorio nacional y dará valor agregado a los concentrados.
Ajustes técnicos
El 5 de febrero se inició con la calibración y ajustes técnicos del horno Ausmelt.
Villavicencio informó que se realizaron las pruebas técnicas de los equipos en frío y ahora se está en la última fase con el encendido del horno.
“Ya hemos llegado a los 1.100 grados centígrados de temperatura en el horno, estaríamos a unos 150 grados de iniciar la alimentación previa de escoria sólida y cuando se logre la sangría de escoria se inicia la fase de refinación”, explicó.
Por el momento, se realizan los ajustes de otros equipos como la verificación de presión del caldero, temperaturas de salida a los filtros, composición de los gases, entre otros ajustes técnicos necesarios.
La temperatura de trabajo que debe alcanzar el horno es de 1.350 a 1.400 grados centígrados para iniciar con el proceso y tratamiento de los concentrados de estaño.
“El objetivo es obtener la mayor recuperación de los concentrados de estaño”, remarcó el ejecutivo de Vinto.
Proceso de industrialización
De manera gradual, Bolivia avanza en la industrialización de las materias primas.
Al respecto, el director de la Fundación Jubileo, Juan Carlos Núñez, señaló que la industrialización es un proceso largo pero dará sus frutos.
“Hoy tal vez estamos sembrando para que cosechen las generaciones futuras”, indicó.

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