Mientras la producción de minerales se mantiene activa y las principales empresas, tanto privadas como estatales, mantienen su ritmo productivo y, en algunos casos, con la mirada puesta en la habilitación de nuevos proyectos, tal el caso de Huanuni con un nuevo ingenio, la Metalúrgica de Vinto con el horno Ausmelt , la planta de zinc con mayor respaldo financiero, el caso de la minera San Cristóbal del sector privado con mayores índices de producción, lo propio sucede con las otras de la línea "santa", como se llama a las de Potosí, San Bartolomé y San Vicente, además de Manquiri, marcan avances interesantes en la obtención de minerales variados.
A propósito de ese factor el Servicio de Impuestos Nacionales (SIN) señala que las recaudaciones tributarias hasta febrero pasado se incrementaron en el orden del 32 por ciento, con relación a similar periodo del año pasado, tomando en cuenta principalmente la recuperación por el Impuesto a las Utilidades de las Empresas (IUE) que generaron las productoras mineras por sus ingresos excedentarios en "periodos de bonanza", se supone con precios altos por los minerales en las pizarras internacionales.
Cuando se habla de materia impositiva, el sector minero paga en total una alícuota del 37,5 por ciento, en función de una reglamentación que señala la obligatoriedad de cancelar el 25 % del tributo, pero además un adicional del 12,5 %, cuando los precios son altos, lo que suma una contribución del 37,5 %.
El SIN percibe ese total al amparo de la Ley 3787 de noviembre del 2007 que grava "las utilidades adicionales" de las empresas del sector (minero) "originadas en condiciones favorables de precios de minerales y metales".
Un dato revelador del Ministerio de Minería y Metalurgia (MMM) muestra que el valor de las exportaciones en la gestión 2010 fue de 2.406 millones de $us, en tanto que en el 2011 creció a 3.398 millones de dólares. Algo más, sólo con relación a los dos primeros meses del año en curso, el SIN por concepto del IUE recaudó 953,8 millones de bolivianos mientras que en igual periodo del pasado año 2011, la recaudación fue tan sólo de 499,8 millones de bolivianos. En realidad las recaudaciones por concepto de contribución minera, ocupan el segundo puesto después de los hidrocarburos, particularmente en un periodo en que también se registra una disminución en el precio del petróleo en el mercado externo.
En realidad, hay condicionantes que afectan sensiblemente los dos sistemas productivos más importantes del país y que se produce en la extracción de los recursos naturales más codiciados, hidrocarburos y recursos mineralógicos, que a su vez recibirán un mayor apoyo financiero para alcanzar las metas productivas trazadas en ambos casos para el sostenimiento del TGN como la base económica de la economía nacional, además por el beneficio indirecto y real, que se traduce en regalías para los departamentos, las regiones y municipios donde se efectúan las grandes operaciones de extracción de nuestros recursos naturales.
Medios – Agencia Uru
Al titular de ésta nota señalamos que existen dudas sobre la producción y la exportación de minerales y claro que las hay, las mismas que reflejamos en la baja de las exportaciones mineras, justamente en los primeros meses de la gestión en curso (Página tres).
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