martes, 7 de febrero de 2012

Mina Bolívar y la volatilización de estaño

Historia de mina Bolívar

Mina localizada en la provincia Poopó del departamento de Oruro, a 4.014 msnm, a 105 y 331 kilómetros de las ciudades de Oruro y La Paz. Fue descubierta en 1810 por Gonzalo de Antequera y hasta 1890 se explotó únicamente plata, luego comenzó la explotación de estaño.

En 1922 se organizó en la Bolsa de Santiago de Chile la Compañía El Salvador con un elevado capital de 1,82 millones de libras esterlinas. Se preparó la mina, se construyeron el campamento, un ingenio, las instalaciones necesarias y el ingenio. La producción iniciada en 1924 en quintales (qq) de barrilla del 60% Sn, que provocaron drásticas subidas y caídas en el valor de las acciones fueron: primer mes 5.000qq (138 toneladas finas), segundo mes 4.000qq, tercer mes 3.000qq y el cuarto 1.000qq. El quinto mes la compañía se declaró en quiebra, con consecuencias dramáticas como la pérdida de inversión de la clase media en Chile, que había comprado acciones, y trágicas como el suicidio del metalurgista americano que se ahorcó en Pazña y el suicidio en Santiago del hombre que había recomendado con su firma, la capitalización de El Salvador en la bolsa, el famoso ingeniero chileno Emilio Díaz, Gerente de Llallagua y causante de la masacre de Uncía en 1923.

El fracaso se debió a la falta de tecnología adecuada para el tratamiento de minerales muy complejos y al tamaño microcristalino del estaño. Las elevadas producciones de los primeros meses seguramente se debieron a la acumulación de las guías (minerales con ley comercial sin necesidad de concentrar, provenientes de vetas con una potencia de 2 metros con 13 a 16% Sn), que fueron insuficientes para el volumen de producción proyectado. El fracaso dejó un relave (colas de ingenio) de 70.000 toneladas con una ley media de 3% Sn.

En 1935 la mina pasó a depender de Hochschild que en 1948 la dió en arrendamiento a la empresa Tihua Mines, que renovó el contrato con Comibol en 1952 y después, con un canon del 12% sobre el valor neto de la producción. El 15 de marzo de 1971 en el gobierno del Gral. Juan José Torres fue revertida a Comibol, que continuó explotándola por estaño y desde el año 1993 mediante contrato de riesgo compartido fue trabajada por Comsur, que en 2005 por la venta de acciones se transformó en Sinchi Wayra, siendo actualmente una de los mayores productoras de zinc, plata y plomó del país. La capacidad de tratamiento de su ingenio pronto será ampliada de 1.200 a 2.700 toneladas por día.

Naturaleza del mineral y la volatilización

Los minerales están constituidos por una mezcla íntima de galena (sulfuro de plomo), sulfuros de zinc (principalmente marmatita), sulfuros de hierro (variedad de piritas), siderita y casiterita microcristalina en forma de agujas: las más grandes tienen 60 micrones (milésimas de milímetro) de longitud por 30 micrones de diámetro. Estas agujas invisibles están finamente incrustadas en el resto de los minerales que forman el complejo y hacen prácticamente inseparable a este tipo de casiterita.

Como consecuencia, en las operaciones de concentración (flotación de sulfuros y luego concentración gravimétrica del non float), los resultados eran sumamente pobres, pues a partir de 2% de estaño se llegaba a concentrados de apenas 13% con una recuperación de solo 17% en el mejor de los casos y con impurezas severamente castigadas por las fundiciones, lo que no ocurría con el estaño de otras minas cuyos resultados eran mucho mejores.

Esta situación y el hecho de que las guías -que permitieron algunos períodos de bonanza- fueran cada vez más escasas, movieron al Gerente de Tihua Mines Sr. Jorge Salinas García, a investigar otros métodos de concentración. A comienzos de 1966 se le ocurrió meter el mineral en hornos para producir matas de Sn, Zn y Pb, pero notó que éstos no estaban en las matas sino en los filtros como polvos. Por ello decidió realizar pruebas de volatilización en escala industrial en las instalaciones existentes en la Fundición de Estaño Oruro de la Sucesión Peró, cuyos resultados positivos dados a conocer por los ingenieros Jorge Salinas y Mario Sahonero, en el Primer Simposio Internacional de Concentración del Estaño efectuado en Oruro en octubre de 1966, fueron la nota destacada del evento, al indicar que se llegó a concentrados con una ley media del 20% y recuperaciones de alrededor del 90%.

Merece destacarse que el mineral de Bolívar demostró ser extraordinariamente apropiado para la volatilización porque sin necesidad de fundentes ni de sulfurizantes, los cuales contenía en su propia composición, se volatilizaron totalmente el Sn, Pb y Zn. La no necesidad de fundentes ni sulfurizantes obviamente tenía incidencia en el costo de volatilización, que fue estimado en 30 dólares por tonelada tratada. Además entonces este mineral no necesitaba preconcentración, como ocurrió después con las plantas operadas por Comibol incluida la de La Palca.

Alentada por los resultados Tihua Mines decidió la instalación de una planta de volatilización, cuyo diseño fue revisado por el afamado metalurgista alemán (RDA) Dr. Joachim Barthel, gran colaborador del país. El proceso de volatilización de estaño básicamente consiste en que la casiterita en una primera etapa es transformada en sulfuro volátil por efecto del calor y de un agente sulfurizante. En una segunda etapa, por efecto de la acción del aire inyectado a presión, se lo convierte nuevamente en óxido de estaño en forma de polvos, que al salir del horno rotatorio pasan por una cámara de choque y se recuperan en filtros de mangas.

Para encarar el proyecto Tihua Mines contrajo un préstamo del BID de $us 200.000 y casi $us 400.000 fueron financiados con créditos locales y la totalidad de disponibilidades de los propietarios de la empresa. Cuando Tihua tenía ya en funcionamiento, después de más de dos años de construcciones, experiencia y reajustes, la casi totalidad de su planta de volatilización y después de haber hecho trabajos de preparación en la mina, el 15 de marzo de 1971 Comibol le notifica con una resolución unilateral de rescisión del contrato de arrendamiento y al día siguiente toma las instalaciones de la empresa.

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